L D (EFE) El Sevilla se ha presentado por primera vez como equipo centenario ante su afición con una victoria ante un Alavés que facilitó las cosas con un pobre juego en el ataque y con debilidades defensivas. Como había anunciado Chuci Cos, los jugadores del conjunto vitoriano salieron con las líneas muy juntas para impedir crear espacios que fueran aprovechados por los rápidos y habilidosos Jesús Navas y Saviola. El equipo sevillista lo tuvo complicado con ese planteamiento y le costó mucho hacerse dueño del centro del campo.
Las bandas del Sevilla estuvieron prácticamente inéditas y los intentos por el centro siempre acabaron con el balón en los futbolistas del equipo alavesista, quienes montaron una muralla infranqueable. Además, con el despiste y falta de intensidad de los locales, el Alavés encontró espacios para montar contragolpes, aunque Bodipo y Aloisi tampoco lo tuvieron fácil ante la pareja de centrales sevillistas. Cuando se acercaba el partido a su primera media hora y las cosas pintaban mal para la formación andaluza, el Sevilla creó la primera opción de gol y no la desaprovechó, tras un buen pase de Maresca, un buen movimiento de Luis Fabiano y la definición de Adriano.
El 1-0 no mejoró el juego hispalense, muy impreciso y falto de ideas, pero tampoco aumentó la capacidad creativa del Alavés, con la circunstancia de que tenía la obligación de busca la portería local. En la segunda parte, el equipo visitante, en su afán de buscar el empate, le dejó sitio al rival para que imprimiera la velocidad que le faltó en la primera y, a las primeras de cambio, llegaron claras ocasiones para que se pusiera el 2-0, aunque, en la tónica habitual de la temporada, costó mucho que el balón traspasara la meta.
El Alavés, con Wesley impreciso en la misión de montar los ataques y en general todo el equipo con pocos recursos con el balón, inquietó escasamente. Pero el Sevilla, debido al corto resultado, tampoco las tuvo todas consigo e incluso Palop evitó el empate tras un remate del propio Wesley. La incertidumbre acabó cuando Franco Costanzo le hizo penalti a Saviola y la pena máxima la transformó gol Maresca, lo que ya fue definitivo para la sentencia del choque, pese a que Nené tuvo una gran oportunidad de acortar distancias en un lanzamiento de falta que acabó con el balón en la cruceta, ya en el tramo final del encuentro.
El 1-0 no mejoró el juego hispalense, muy impreciso y falto de ideas, pero tampoco aumentó la capacidad creativa del Alavés, con la circunstancia de que tenía la obligación de busca la portería local. En la segunda parte, el equipo visitante, en su afán de buscar el empate, le dejó sitio al rival para que imprimiera la velocidad que le faltó en la primera y, a las primeras de cambio, llegaron claras ocasiones para que se pusiera el 2-0, aunque, en la tónica habitual de la temporada, costó mucho que el balón traspasara la meta.
El Alavés, con Wesley impreciso en la misión de montar los ataques y en general todo el equipo con pocos recursos con el balón, inquietó escasamente. Pero el Sevilla, debido al corto resultado, tampoco las tuvo todas consigo e incluso Palop evitó el empate tras un remate del propio Wesley. La incertidumbre acabó cuando Franco Costanzo le hizo penalti a Saviola y la pena máxima la transformó gol Maresca, lo que ya fue definitivo para la sentencia del choque, pese a que Nené tuvo una gran oportunidad de acortar distancias en un lanzamiento de falta que acabó con el balón en la cruceta, ya en el tramo final del encuentro.
Ficha técnica del partido
Alavés, 0: Costanzo; Gaspar, Pellegrino, Juanito, Coromina; Astudillo, Carpintero; Wesley (Lacen, m.75), Nené; Bodipo (Antchouet, m.77) y Aloisi
Goles: 1-0, m.27: Adriano; 2-0, m.70: Maresca, de penalti
Árbitro: Ayza Gámez (Colegio valenciano). Amonestó a los visitantes Gaspar (m.33), Carpintero (m.58), Costanzo (m.71), Astudillo (m.74), Nené (m.77) y Pellegrino (m.83), y a los locales Aitor Ocio (m.50) y Daniel Alves (m.69)
Incidencias: Partido de la octava jornada de Liga en Primera División disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante cerca de 40.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones. A la salida de los jugadores se creó un gran mosaico en las gradas con las banderas que el club ha regalado a sus 37.700 abonados con motivo del Centenario de la entidad sevillis