L D (EFE) La derrota que Gales sufrió en Belgrado a manos del conjunto serbio-montenegrino se vio salpicada de ruidos ofensivos, procedentes de las butacas, que se asemejaban a los que hacen los monos, y que los seguidores locales dedicaron a los jugadores visitantes de color. Danny Gabbidon, Nathan Blake y Robert Earnshaw sufrieron similares ataques verbales durante el encuentro que se disputó en el estadio Red Star. Ante lo sucedido, la federación de fútbol galesa remitirá una queja oficial a la UEFA, para que tome cartas en el asunto.
"Siempre es decepcionante cuando escuchas esto y es algo que tenemos que erradicar", apuntó Hughes. Con relación a estos sonidos, uno de los jugadores galeses, Earnshaw, señaló que, "en cierto modo, esperaba que esto pasase". "Lo escuché. Cada vez que Danny, Blakey o yo tocábamos la pelota lo oíamos y esto, simplemente, no es algo aceptable en el fútbol", dijo. "En cierto modo, lo esperaba, porque hemos oído por otros jugadores lo mal que está esto (el racismo) en esta parte del mundo, pero me sorprendió un poco ver cómo se pusieron las cosas durante el partido", añadió el internacional.
"Siempre es decepcionante cuando escuchas esto y es algo que tenemos que erradicar", apuntó Hughes. Con relación a estos sonidos, uno de los jugadores galeses, Earnshaw, señaló que, "en cierto modo, esperaba que esto pasase". "Lo escuché. Cada vez que Danny, Blakey o yo tocábamos la pelota lo oíamos y esto, simplemente, no es algo aceptable en el fútbol", dijo. "En cierto modo, lo esperaba, porque hemos oído por otros jugadores lo mal que está esto (el racismo) en esta parte del mundo, pero me sorprendió un poco ver cómo se pusieron las cosas durante el partido", añadió el internacional.