El Sao Paulo, primer finalista del Mundial de Clubes tras derrotar al Al Attihad (3-2)

L D (EFE) El conjunto "tricolor" brindó un buen espectáculo a su numerosa hinchada, que calentó el ambiente en el gélido Estadio Nacional de Tokio. Los primeros 20 minutos del partido tuvieron color brasileño. La escuadra que dirige Paulo Autuori comenzó controlando el centro del campo con solvencia y llegando con peligro a la portería de Zaid, ante la aparente pasividad de su rival. A los diez minutos Cicinho dio el primer aviso al disparar alto tras recibir completamente sólo a escasos metros de la portería. El veloz lateral derecho internacional brasileño que a partir de enero se incorporará a las filas del Real Madrid fue uno de los jugadores más determinantes del partido.

El Sao Paulo se sentía cómodo mientras su contrincante seguía sin dar señales de vida y a punto de cumplirse el primer cuarto de hora marcó su primer gol. Un centro de Danilo sin aparente peligro fue mal despejado por la zaga saudí. Amoroso controló el rechace y disparó con la fortuna de que el balón tocó en un defensa y despistó al portero. Cuatro minutos después, cuando el Al Ittihad aún no se había recuperado del golpe, Amoroso surgió de nuevo entre la defensa para cabecear alto un centro de Junior. El partido parecía cuestión de un sólo equipo, pero el Sao Paulo bajó los brazos y permitió que la formación saudí se creciera.

A la media hora de juego llegó el gol del empate. Mohammed Noor culminó un contraataque empujando al fondo de las redes un balón que había detenido Ceni, tras un disparo del sierraleonés Kallon. El delantero africano volvió a superar en velocidad a la zaga brasileña poco después y obligó a Ceni a estirarse de nuevo. Con el campeón de la Copa Libertadores contra las cuerdas finalizó la primera mitad.

El Sao Paulo regresó al campo dispuesto resolver el partido por la vía rápida para evitarse sustos. Cuando sólo había pasado un minuto, una bellísima triangulación en la frontal del área finalizó con un centro de Cicinho que remató Amoroso solo en el palo contrario para apuntarse su segundo tanto de la noche. Seguidamente entró en acción el portero-goleador paulista y demostró su habilidad ejecutando faltas directas, aunque su lanzamiento se le fuera ligeramente alto.

Este disparo le sirvió de calentamiento porque a los diez minutos de la reanudación Tukar derribó a Aloisio en el área y el árbitro señaló la pena máxima. Ceni , que cuenta en su haber con cinco goles en la pasada Copa Libertadores y otros cinco en el campeonato de liga, se dirigió al punto de penalti y no perdonó. El duelo parecía sentenciado, pero una vez más, el once brasileño se descuidó y encajó un nuevo gol. El defensa Al Montashari , mejor jugador del año en Asia, marcó de cabeza tras el saque de un córner. Quedaba un cuarto de hora para el final y el Al Ittihad volvía a verse con posibilidades.

En los minutos finales ambos equipos pudieron haber marcado, después de que Aloisio cabeceara fuera un centro medido de Danilo y Kallon tuviera que ser derribado al pie del área por Lugano para que no se plantara sólo ante Ceni. El Sao Paulo acabó saliendo airoso gracias a su mayor oficio frente al ímpetu de los futbolistas asiáticos, quienes nada más finalizar el partido acorralaron al árbitro con airadas protestas.