Me pregunto qué habrían hecho Brasil, Italia, Alemania o Argentina si, a falta de diez minutos para el último partido de la primera fase de un Mundial y con un marcador de 2-1 a favor, fueran conscientes de que ese resultado les emparejaba con Portugal en octavos y de paso lograban esquivar al coco del campeonato. Me respondo que habrían hecho exactamente lo mismo que ayer hizo España. Puede que por eso ellos sumen tantos títulos y nosotros ninguno. Me pregunto quién recordará que al final del partido contra Chile nos dedicamos a especular con el marcador, como en nuestro lugar habría hecho todo hijo de vecino, si conseguimos el Mundial por primera vez en nuestra historia, y me respondo que nadie se acordará de eso. Nos hacemos demasiadas preguntas y abrimos tantos debates que luego no tenemos tiempo para cerrarlos. Y quiero recordar que así no nos fue demasiado bien en el pasado.

¿Basta con pasar? ¿No hay que jugar bonito? ¿Será suficiente con esto? ¿Y si el portero de Portugal lo para todo? ¿Y si nos expulsan a uno el martes? Y si pasamos, ¿con quién nos tocará luego?... ¿Y si? ¿Y si? ¿Y si?... Seguimos siendo unos Quijotes. Han pasado 400 años pero continuamos peleándonos contra los molinos de viento. Habíamos venido a Sudáfrica a asombrar al mundo, no entraba dentro de nuestros planes que nuestro fútbol resultara tan trabado. El día de Suiza era la derrota, el de Honduras la cortedad del resultado y ayer que Bravo no estuvo bien y que el árbitro mejicano dejó a los chilenos con diez. Espero que Queiroz le dé a Del Bosque el mismo baño táctico que le dio Bielsa ayer y que el resultado final sea el mismo: España clasificada. ¿De eso se trata?... Pues claro que se trata de eso. La pregunta está de más. Naturalmente que se trata de eso.

Quien esté jugando realmente bien al fútbol en este Mundial que levante la mano si se atreve. Nadie está jugando bien. Probablemente esté siendo uno de los campeonatos más pobres de los últimos tiempos. Tampoco juegan bien los favoritos. Y ahora nos encontramos con Portugal en octavos y, si logramos esquivar a Ronaldo, Paraguay o Japón en cuartos. ¿Y si luego nos tocan Argentina, Alemania o Inglaterra en semifinales?... ¿Pero no les hemos ganado a los tres recientemente?... España sólo tiene un rival serio a priori y es la propia España. ¿Quiere decir eso que no se puede criticar el juego de la selección?... En absoluto. Pero mientras el resto de los premiados festeja que sigue en el Mundial, nosotros nos preguntamos de dónde venimos y hacia dónde vamos. Ser o no ser... Todo constituye para nosotros un insalvable dilema. ¿Y si? ¿Y si? ¿Y si?... ¿Y si resulta que acabamos ganando el Mundial?... Menudo trago. El 12 de julio no habría quien circulara por Madrid.