Abro paréntesis: (Uno tiene que ser un auténtico mamarracho periodístico para afirmar que una Copa de Europa de clubes se puede ganar de manera vergonzante. Y, aunque el número de Copa de Europa dé igual, porque tan difícil es ganar la primera como, por poner un ejemplo, la décima, y la nacionalidad del equipo en cuestión resulte, para el caso que nos ocupa, indiferente, si además sucede que la Copa de Europa es la novena, la nacionalidad del equipo es la española y tú diriges un diario deportivo español, a la mamarrachez uno debe sumar obligatoriamente un nivel notable de desahogo personal y una evidente ausencia de escrúpulos profesionales. Y si, sumado a todo lo anteriormente dicho, no sólo te mantienen en tu puesto sino que además te promocionan hacia la radio, la mamarrachez, el desahogo y la carencia de escrúpulos es extensible a quien te puso ahí). Cierro paréntesis.
Hablemos sin tapujos: claro que Xabi se presentó con la camiseta negra del dragón. Probablemente ni siquiera él supiera en ese instante que se iba a marchar al Bayern... aunque ya no pongo la mano en el fuego por nadie. A Xabi le queremos mucho porque su actitud tanto dentro como fuera del campo ha sido siempre ejemplar y porque durante los cinco años que ha permanecido en el Real Madrid lo ha dado todo por esa camiseta, pero... la improvisación ha sido suya y sólo suya, no de la planificación del Real Madrid. Al contrario, el Real Madrid le amplió a Xabi su contrato y él lo firmó. Firmó la ampliación de contrato, se presentó con la camiseta del dragón, dijo que el dragón les iba a dar mucha fuerza para conquistar La Undécima, se quitó la camiseta del dragón, se fue a casa, recibió la llamada de uno de los peores enemigos deportivos del Real Madrid y aceptó el ofrecimiento de jugar a sus órdenes en uno de los mayores rivales del club blanco. Bochornoso.
La rueda de prensa que Xabi convocó para despedirse de la afición madridista no aclaró absolutamente nada. ¿Por qué se va?... Ni idea. Él mismo dijo que no se iba porque fuera a tener menos minutos con la llegada de Kroos. Sus declaraciones volvieron a ser formalmente perfectas pero vacías de contenido. ¿Falta de motivación tras La Décima?... Eso es como si Rafa Nadal hubiera dicho tras ganar su primer Roland Garros que no volvería a jugar en París porque, al ganar el torneo, se había quedado sin motivación. La motivación de Nadal tras ganar el primer Roland Garros era ganar el segundo, y luego el tercero, y después el cuarto... La motivación de Xabi después de ganar su primera Copa de Europa con el Madrid debía ser, creo yo, ganar la segunda, y luego la tercera, y después la cuarta. Le habría venido bien una charla al respecto de la motivación con don Francisco Gento.
Con Xabi resulta que como es un tipo tan serio, tan educado y tan elegante, el periodismo deportivo español teme dejarle en mal lugar. ¿Qué debería haber hecho el Real Madrid cuando, a falta de 48 horas para el cierre del mercado, le llega un jugador titular que ha ampliado su contrato hasta 2016 y le dice que se quiere ir al Bayern y que acepten su decisión? ¿No dejarle marchar? ¿Retener contra su voluntad a un futbolista que es querido y respetado por todos?... De acuerdo, Xabi se ha ganado a pulso el cariño y el respeto de todo el mundo... pero no habrá sido por su decisión de irse al Bayern con el mercado a punto de echar el cierre, ¿no? ¿O con el Real Madrid vale todo?... Por cierto que aún no he oído a nadie decir que Guardiola ha desestabilizado al club blanco.
Estamos a medio minuto de que Florentino Pérez sea responsabilizado de la lesión de Khedira. Khedira, por cierto, que se quedó en el Real Madrid no por hacerle un favor al club blanco sino porque así quedará libre y la próxima temporada podrá fichar por quien le dé la gana sin que el Madrid vea un euro de traspaso. ¿Qué debería hacer el Real Madrid?... Ya lo digo yo: una vez recuperado, allá por mediados del mes de octubre si las cosas van bien, ¡a la grada siete meses!... ¿Qué hará el Madrid con Khedira cuando se recupere?... Tratarle bien, como hace con todos y cada uno de sus jugadores. Como hace, por cierto, con Cristiano, que es el futbolista mejor pagado del mundo y que, probablemente debido a eso y a que también es el mejor jugador del mundo, se ha creído con la potestad suficiente para hablar en público de cosas que no le conciernen.
Por cierto que Di María, ese gran madridista que rogó al club quedarse en España porque tenía un problema estrictamente personal, acaba de decir después de afirmar que su sueño era fichar por el United que fue gracias a Cristiano que se quedó la temporada pasada. De las desafortunadas declaraciones de Ángel se extrae, además, que él solito ganó la Copa de Europa. Si Di María se quedó el año pasado gracias a Cristiano... ¿por qué ya no está en el club? ¿El poder de Cristiano es intermitente y afecta únicamente a aquellas temporadas que empiezan en año impar?... Di María se quedó en el Madrid, como decía, para solucionar un problema personal y se ha marchado una vez arreglado. ¿Qué debería hacer el Real Madrid con las declaraciones de Di María?... Yo le pondría en su sitio, el Real Madrid callará y seguirá trabajando con una planificación deportiva desastrosa para intentar ganar de forma vergonzante La Undécima Copa de Europa.