A punto estuvo Nacho de irse a la Roma este verano. Ojo, a la Associazione Sportiva Roma, un club italiano con mucha tradición, sí, pero que no es ni por el forro el Real Madrid. Estoy seguro de que Nacho sería titular indiscutible en la Roma; es más, él mismo está seguro de que sería titular en la Roma porque, de lo contrario, no habrían venido a por él. Pero, como decía antes, la Roma no es ni por asomo el Real Madrid, más que nada porque ningún club de fútbol del mundo es ni por asomo el Real Madrid. Por eso, porque Nacho prefirió ser cola de león antes que cabeza de ratón, el madrileño eligió quedarse en su club de toda la vida, cuestión ésta que no acaban de entender en la prestigiosísima firma Latham & Baker & Austin & Ellis Abogados, que se apunta a un bombardeo contra el Madrid.
Sólo te digo una cosa, querido Nacho. Huye. Corre. Sal pitando. No mires hacia atrás. Y no me refiero, por supuesto, al Real Madrid, que, hagas lo que hagas en el futuro, continuará siendo tu casa para siempre. Huye de Latham & Baker & Austin & Ellis Abogados. Corre como si no hubiera un mañana. No atiendas sus SMS. No cojas sus llamadas. Pasa de sus watshapp. No mires tu correo electrónico. Con Latham & Baker & Austin & Ellis Abogados pasa como con los vampiros, que si los invitas a pasar a tu casa se apoderan de tu alma. No hay vuelta atrás. Y, además, no es cierto que sea una firma tan prestigiosa como van diciendo ellos mismos por ahí. Te usan, Nacho, y luego te dejan tirado en la primera cuneta que encuentran.
En el haber de Latham & Baker & Austin & Ellis Abogados está, por ejemplo, la defensa de Iker Casillas. La cosa acabó como acabó: con Iker en el Oporto y con la presunta amistad que tenía con sus abogados defensores rota en mil pedazos. LLevan un tiempo defendiendo, a su pesar, a Isco, y si Paco no está listo le hundirán en la miseria. Defendieron a Özil. Y a Di María. E intentaron hundir a Modric, Kovacic o Casemiro, que hoy triunfan en el once veces campeón de Europa. No quiero engañarte, Nacho: en el mundillo de la abogacía comienza a rumorearse que son más gafes que Gastón el gafe y Pierre Nodoyuna juntos. Si llaman a la puerta de tu casa, quédate quieto, inmóvil, haz un Mannequin Challenge. Sal a entrenar con gafas de sol, con el casco de la moto puesto y con barba y bigote postizos, y vuelve rapidito a tu casa. Aguanta, admirado Nacho. Resiste. Y, luego, por supuesto, haz lo que quieras porque siempre, siempre, siempre te desearemos lo mejor.