Ayer publiqué aquí mismo un artículo titulado "Ceballos y Theo, bien; Vitolo, rematadamente mal", cuyo principal argumento radicaba en que mientras los dos primeros habían resistido las presiones, que en el caso de Theo parece que llegaron incluso por parte de su propio representante, el tercero jugó arteramente con el Sevilla, se hizo el loco para sacarle más dinero a Pepe Castro, y, en el último segundo, le hizo la pirula al club que le había convertido en un futbolista popular. No hablé de dinero ni tampoco empleé terḿinos tan duros y fuera de contexto como el de "traición", pero anoche, en El remate de El Primer Palo, mi admirado Gonzalo Heredero, colchonero y antimadridista, o antimadridista y colchonero, que nunca he sabido el orden exacto y apropiado de sus preferencias, la tomó con el pobre Theo, de quien llegó a decir incluso que lo único importante para él era la pasta.
O yo no me expliqué bien, que puede ser, o mi amigo Gonzalo no me entendió, que también cabe esa posibilidad. Yo no dije que Ceballos y Theo hubieran estado bien y Vitolo mal por el destino escogido para desarrollar su carrera deportiva sino por la firmeza en sus convicciones, que en el caso de Theo fue incluso mayor. Si, tal y como apunta Gonzalo, establecemos que Theo se ha ido sólo por dinero al Real Madrid, que ha pagado incluso más de lo que estaba estipulado en su cláusula de rescisión, deberemos concluir que todos los futbolistas se van de un club a otro por el mismo motivo, por el vil parné, pero también aquellos que ficha el Atlético de Madrid. Como en otras ocasiones, a Theo quisieron ponerle un puente de plata con destino al Camp Nou pero el chico se plantó y, harto del gilipacto, el Madrid también dijo "¡basta!"...
Theo y Ceballos estuvieron bien porque decidieron su propio destino con pulso firme y estuvieron dispuestos a soportar mil y una presiones mientras que Vitolo apuñaló al sevillismo por 2 millones de euros más al año. Nada se le podría reprochar a Vitolo si, como hizo Theo con el Real Madrid, él hubiera optado por el Atleti desde el primer minuto y no hubiera jugado con el Sevilla, pero no fue así. En cuanto a lo de la traición, yo creo que en el caso de Theo no se produjo puesto que, tal y como se encargó de recordar el propio club colchonero en un psicodélico comunicado, el chico no llegó a debutar en partido oficial con la camiseta del primer equipo; de haberse producido, que no creo, Theo habría traicionado al Alavés, su primer y único, hasta ahora, equipo en Primera. Y así, de este modo, remato El Remate de Gonzalo Heredero, que no sé si hallará Contrarremate en el futuro.