Me pregunto qué pasaría con un Real Madrid que tuviera arriba a Cristiano, Agüero y Falcao. Y me respondo que algo gordo, muy gordo. También me pregunto cómo es posible que el Atlético de Madrid fuera capaz de captar en tan poco tiempo a dos de los diez mejores futbolistas del mundo mientras que, según Mourinho, en las oficinas de la casa blanca no se sabía quién era Khedira o que Özil andaba a palos con su club. El Atlético siempre ha ido mejorando: para sustituir a Torres se hizo con el Kun y cuando éste se largó dejando empantanado al equipo y parecía imposible traer algo mejor de repente apareció por la puerta un delantero centro como la copa de un pino y uno de los más completos que yo haya visto jamás. Da la sensación de que mientras unos trabajaban los otros se dedicaban a ir por ahí tocando el clavicordio y recitando poemas de amor. Al final nada importa porque siempre está papá Florentino.
Claro que si Agüero no está jugando ahora en el Real Madrid no es porque el chico no quisiese, que quería, o porque al club blanco no le gustase, que le gustaba, sino debido a la existencia de ese hipotético acuerdo entre caballeros que se firmó en su día según el cual ninguno de los clubes tiraría los tejos deportivos a sus respectivas estrellas. De existir dicho acuerdo es claramente perjudicial para los intereses merengues puesto que el presupuesto del Real es infinitamente superior al rojiblanco y no veo yo a Enrique Cerezo yendo a por Cristiano o Benzema. El caso de Agüero fue peor puesto que el chaval quería irse del Atlético, lo que finalmente hizo al desembarcar en el City, pero el Madrid no quiso o no pudo ejercer su derecho de tanteo en aras a un pacto cuyo único objetivo parece que es lograr que Miguel Angel Gil se sienta bien consigo mismo.
Lo peor de la broma que Florentino le gastó el otro día a Falcao con la servilleta es que es eso, una broma. Y, como todos podrán imaginar, la finalidad del presidente del Real Madrid no era otra que esa. Me parece que el guiño se quedará ahí, que el colombiano acabará la temporada en el Atleti y que luego emigrará a la Premier y allí se hartará a meter goles. Y no lo entiendo. Con Cristiano, Higuaín y Benzema el Real Madrid tiene ahora mismo uno de los arsenales ofensivos más letales del mundo, pero con Cristiano, Agüero y Falcao sería el mejor de largo. La presencia de Falcao en el Madrid, puesto que la del Kun ya parece imposible, otorgaría a esa plantilla un plus de calidad que ahora mismo es dificilísimo de lograr. Si yo fuera Florentino iría descaradamente a por él aunque eso me costara un rapapolvo de Gil y de Cerezo. Tampoco conviene llevar al extremo del absurdo eso de "caballeros dan la mano"...