En España somos unos angelitos, ahora va a enterarse Fabio Capello de lo que cuesta un peine en Harrods. Con decirles que el Daily Mail reaccionó así nada más conocer la noticia del fichaje de Sven Goran Erikkson como seleccionador nacional: "Hemos puesto nuestro destino en alguien que procede de un país con siete millones de esquiadores". Porque, aunque llevan sin comerse un colín desde tiempos inmemoriales, los ingleses, que son muy suyos, están explotando desde hace cien años eso de que ellos son los auténticos inventores del fútbol moderno y, a pesar de sus continuos batacazos, siguen mirándonos a todos por encima del hombro y un poco de reojo, como si fuéramos unos advenedizos. Tuvieron que transigir con el sueco, un portugués acaba de decirles que no y, por último, de rebote, tal y como dice acertadamente José Miguélez, no han tenido más remedio que rendirse ante un italiano que gana partidos, sí, pero que mató a la oveja Dolly de puro aburrimiento. ¡Cuerpo a tierra que llega Capello! God saves the Queen.
Y no se quejen porque podría haber sido bastante peor: Hierro podría haber pensado en él como sustituto de Luis. El italiano, que ha comparado las situaciones de bloqueo mental que sufren tanto Inglaterra como España, va a convertirse en el psiquiatra más caro de la historia de la humanidad y, por el módico precio de cinco millones y medio de euros anuales, piensa sentar en el diván a los Lampard, Gerrard, Rooney y compañía para que éstos le hablen de su infancia y de si tenían muchos amigos o pocos o de si fueron felices y comieron perdices y esas cosas que te piden los psiquiatras que les cuentes. Aunque sólo sea por la desorbitada "dolorosa" que les pasará el doctor, ya les conviene a los directivos de la federación inglesa que sus chicos se desbloqueen cuanto antes. Tal y como yo lo veo, esto es un poco parecido a esos terapeutas que te cobran por dejar de fumar, te meten en una sala y te insultan, te llaman gusano repugnante y te dicen que cómo es posible que sigas suicidándote con la nicotina, que si no te da verguenza. A Capello le han fichado para que insulte a los "galácticos" de la Premier League.
Sobre Inglaterra yo sostengo una teoría un tanto peculiar, lo reconozco, y es que no necesitan un seleccionador sino un entrenador que distraiga a los tabloides. Visto así, Capello, que a mí siempre me ha parecido el séptimo Monty Python, es sin duda el hombre ideal para ser despedazado, sólo por detrás de Mourinho que era el primer candidato para el puesto. Para el Sun es la combinación perfecta: un entrenador italiano que ama el arte o que se ofende viendo las piernas peludas de un hombre. El Daily Star titulaba así ayer: "el pasado secreto y drogadicto del nuevo seleccionador inglés". No se ha puesto todavía el chándal, ni siquiera ha colocado su defensa de cinco sobre el campo y ya le han sacado en portada vestido con un tutú, en posición balancé, como si se tratara de la mismísima Maya Plisetskaya. Ya digo que en las Islas están con él como locos; todavía no ha llegado y ya le están echando de menos. Jugar al fútbol no jugarán, pero se van a reír un rato largo.