Ayer oí a un ex director general de Real Madrid TV que ahora, según me han dicho, parece cuestionar la independencia de los periodistas que acudimos a las tertulias del canal que él mismo arrancó hace quince años, manteniendo una acalorada discusión con Luis Rubiales, presidente de la AFE, a propósito de las primas a terceros por ganar. Rubiales defendía que las primas por ganar tenían que legalizarse para que fueran claras y transparentes mientras que Javier Ares, que es el ex director general de Real Madrid TV al que me refiero, se llevaba las manos a la cabeza y ponía el grito (y nunca mejor dicho) en el cielo. Es curioso: en la jornada de ayer sólo se habló de primas a terceros entre las cinco y las siete de la tarde y dejó de hacerse de repente desde las nueve de la noche.
Los periodistas deportivos somos increíbles: nos rasgamos las vestiduras porque un equipo le pague un dinero a otro por ganar pero sin embargo nos resulta divertida la posibilidad de que si el Barcelona llega al último partido contra el Atlético de Madrid sin opciones matemáticas de ganar la Liga... ¡se deje ganar para impedir que el beneficiado sea el Real Madrid!... Si una prima por ganar afecta a las raíces mismas del fair play de la competición y pone en cuestión todos los valores morales de la sociedad y del Estado de derecho, ¿qué se puede decir de que un equipo no se deje la piel para derrotar a otro con tal de perjudicar a un tercero?... El mensaje sería algo así: "Nos parece aberrante que unos jugadores de fútbol acepten una prima por cumplir escrupulosamente con su trabajo pero es muy divertido que otros jugadores de fútbol no jueguen a tope con tal de no beneficiar a su enemigo histórico". ¿Es así? ¿Ese es el fair play de esta Liga?
Enrique Cerezo acaba de decir que si el Atlético de Madrid tuviera dinero se pensaría primar al Elche. También ha dejado entrever que lo normal es que si el Barcelona llega sin opciones a la última jornada... no se deje la piel. Alucinante. Por supuesto que si el Barça llega sin opciones a la última jornada y pierde ante el Atleti jamás se podrá demostrar que lo hizo adrede para perjudicar al Madrid. Tampoco se podrá demostrar jamás que el Levante estaba ayer primado para ganarle al equipo de Simeone o que lo estaba el Valencia para vencer al de Ancelotti. Lo que me llama la atención es que se dé por hecho en los medios de comunicación que sólo prima el Real Madrid (como si no hubiera otros dos equipos implicados en la lucha por la Liga) y que al periodismo le parezca divertida la posibilidad de que el Barcelona se dejara llevar ante el Atleti para quitarle la Liga al Madrid. ¿Fair play? ¿Cuándo ha habido aquí fair play? Lo que hay aquí es fair y unas narices play.
Cerezo dice que si él tuviera dinero... Yo sí que puedo decir que si tuviera dinero haría esto, aquello y lo de más allá. Por supuesto que Enrique Cerezo tiene dinero, mucho dinero. Lo tiene a título personal y lo tiene también el club que preside cuyo presupuesto es el tercero de la competición. El Atlético de Madrid no es pobre sino rico. Pobre es el Rayo Vallecano. Pero daremos por buena la declaración de intenciones de Cerezo: él no ha primado a nadie. Tampoco lo ha hecho el Real Madrid... salvo que alguien pueda demostrarlo. Si alguien puede demostrar que el Real Madrid primó ayer al Levante debería irse con las pruebas en la mano al Juzgado de Guardia más cercano. Lo contrario, el jiji, juju, jaja, debe dejarse para la barra del bar. El Real Madrid perdió dos Ligas en Tenerife en el último partido. Dos. Y al presidente del Tenerife llegó a concedérsele la insignia de oro y brillantes del Barcelona. Dos Ligas. En el último partido. Primas no, tías, sobrinas y hasta cuñadas. Lo dicho: fair y unas narices play.
Posdata: Ya sabemos la opinión del presidente de la LFP a propósito de las primas a terceros por ganar. Ahora me gustaría saber también qué le parecería que un equipo no lo diera todo sobre el campo con el ánimo claro de perjudicar a otro. Y, ya puestos, me gustaría que dijera qué le parece que a un aficionado se le saque de un estadio de fútbol (Camp Nou) por el simple hecho de llevar una camiseta del Real Madrid.