Desde el punto de vista de un club profesional de fútbol, y en concreto desde el punto de vista del Real Madrid, que es el club más rico del mundo y con un presupuesto más elevado, a mí me preocuparían relativamente poco los "madridistas disfrazados" (José Mourinho dixit) o los "españoles disfrazados" (Rubén Uría dixit). Por supuesto que hay que respetar todas las "sensibilidades", también la de aquellos socios que no sintonicen con la actual dirección del equipo blanco e incluso con la de aquellos ciudadanos españoles que, expropiados a la fuerza de los triunfos del equipo nacional por un sector barcelonista que trata en vano de apropiárselos atendiendo al número o calidad de los jugadores culés convocados por Del Bosque, intentan ningunear a los Casillas, Arbeloa, Ramos o Alonso, cuatro fijos indiscutibles en la campeona mundial de Europa.
Vuelvo al principio: lo que a mí, desde el punto de vista de Florentino Pérez, más me preocuparía serían los "especialistas disfrazados", aquellos que dicen saber pero que no saben tanto, los mismos que aseguran conocer pero que tienen un nivel de conocimiento mucho menor al vendido inicialmente. De toda la entrevista que Mourinho ha concedido a France Football yo me quedo indiscutiblemente con este último detalle. Dice Mou que "a Khedira aquí nadie le conocía. La persona hipotéticamente encargada de esa labor no sabía ni quién era. No sabían que Özil tenía problemas con el Werder Bremen". Jorge Valdano dijo anoche en El Larguero que no se sentía directamente aludido por Mourinho cuando éste aseguró que había "madridistas disfrazados": ¿Quién era el Director General de Presidencia cuando Özil y Khedira ficharon por el Real Madrid?... El mismo que viste y calza.
Se deben respetar todas las sensibilidades madridistas, también la de Jorge Valdano que fue primero jugador, más tarde entrenador, después Director General Deportivo y, por último, Director General de la Presidencia. Valdano fue un buen futbolista, ganó una Liga como técnico del primer equipo, su nombramiento como Director General Deportivo pasó sin pena ni gloria y a día de hoy continúo preguntando qué hizo como Director General de la Presidencia sin que nadie sepa contestarme nada. No me gusta faltarle a nadie al respeto, no ha sido nunca ni será en el futuro esa la finalidad de ninguno de mis artículos, pero no sé cómo decir que Valdano no hizo nada en sus dos últimos puestos en el club, ocupaciones absolutamente vacías de contenido, sin decir eso mismo, que Valdano no hizo nada en sus dos últimos puestos en el club. Puede que un modo diplomático de hacerlo sería decir que nadie sabía en el Real Madrid quién era Khedira ni tampoco que Özil tenía problemas con el Werder Bremen, ¿no creen?...