Justicia poética: que Amarte Así, serie más conocida como Frijolito, y el culebrón de Cesc Fábregas y el Barça finalicen el mismo día y a la misma hora. Que nadie se atreva a decirme que no sería emocionante. La mamá y el papá del pequeño y entrañable niño frijol contrayendo matrimonio al mismo tiempo que Cesc se hace la típica foto dándose la mano con Rosell y Zubizarreta. Hubo quien aseguró tajantemente que la historia se resolvería antes del 5 de julio, y aquí estamos, casi a 5, sí, pero de agosto, sin que Fútbol Club Barcelona y Arsenal alcancen un acuerdo. Y mientras tanto se ha dicho de todo: que el jugador estaba molesto porque se hubiera fichado a Alexis antes que a él, que Guardiola le había llamado por teléfono para tranquilizarle, que el chico estaba dispuesto a rebajarse la ficha para venir y que el Real Madrid seguía pendiente de las negociaciones por si podía pescar en río revuelto.
No sé bien por qué cuando oigo a Puyol decir que hay que dejar tranquilo a Cesc o cuando leo a Zubizarreta afirmar que no van a retransmitir las negociaciones me viene inmediatamente a la cabeza la imagen de una fábrica de cemento armado. Ojo que no estoy diciendo que lo de Puyol y lo de Zubi no tenga su mérito, que lo tiene y mucho: no debe ser nada sencillo mentir con tanto desparpajo; pero que el capitán culé pida tranquilidad para un chico a cuyo club se está acosando literalmente y que el director deportivo azulgrana diga que no van a retransmitir las negociaciones cuando es público y notorio hasta el último fleco de las mismas me parece que es, como diría un amigo mío, de aurora boreal. Rabindranath dijo ayer mismo que aún faltaba un fichaje y que todos sabíamos cuál era.
Pablo García Cuervo me preguntó el otro día si Juanma Mata era canterano del Oviedo o del Real Madrid: "Esa es fácil", respondí, "si Mata hubiera resultado una castaña de jugador habría sido canterano del Oviedo pero como resulta que ha salido un pedazo de futbolista es canterano del Madrid porque así se puede acusar al Real de haberla pifiado dejándole escapar". ¿Qué se estaría diciendo ahora mismo del Real Madrid y cómo estarían poniendo a los hermanos Padrós si el club blanco estuviera negociando el regreso de uno de los jugadores de su cantera y fuera a pagar por él 40 millones de euros?... ¿Y qué estará pensando Thiago, que se está saliendo en la pretemporada, del caprichito de su entrenador?... A mí me sigue oliendo a un pulso que Rabindranath quiere echarle a Rosell. Veremos cómo acaba el frijol.