El Kun se burla de nosotros
Cuando un futbolista es insultantemente joven y además luego da un salto, tanto geográfico como futbolístico, muy importante, los periodistas deportivos solemos repetir las cantinelas de la adaptación y, dependiendo de la situación del club al que llegue y de su trascendencia mediática, también de la responsabilidad con la que no se le debe sobrecargar. El caso de Sergio Leonel Aguero sirve perfectamente para ilustrar todo esto que estoy diciendo.
El chico tiene sólo dieciocho añitos y acaba de cruzar el charco para cambiar un fútbol como el argentino, tan distinto, y venirse a la Liga española. Por el "Kun", para más inri, el Atlético de Madrid ha tirado la casa por la ventana tras pagarle veintitrés millonazos de euros, así, a tocateja, al Independiente, convirtiéndose en el fichaje más caro de toda la historia del club rojiblanco. Y, por si todo lo anteriormente expuesto no fuera suficiente, Aguero llega a uno de los tres grandes clubes españoles, un equipo con un historial que le quitaría a cualquiera el hipo pero que ahora mismo no atraviesa precisamente por el momento más álgido de su historia desde que fuera fundado allá por el año 1903.
Pero Aguero, que ostenta el récord de haber sido el jugador de fútbol más joven en debutar en la Primera División de su país, está empeñado en llevarnos la contraria a todos aquellos psicólogos de baratillo que le decimos lo que le tiene que pasar. Le decimos que tiene que poderle la presión, pero él nos baila una cumbia. Le decimos que tiene que experimentar un delicadísimo proceso de adaptación a la nueva ciudad, los nuevos compañeros y las nuevas costumbres, pero él marca goles como rosquillas cuando le sacan al campo. Le advertimos que el Atleti es demasiado arroz para un pollito que acaba de salir de la incubadora, pero nos responde levantando él solo una eliminatoria de Copa del Rey que venía oliendo desde el pasado 7 de noviembre a una nueva decepción rojiblanca, la enésima.
Este Sergio Leonel Aguero es, en definitiva, un descarado, un rebelde, un provocador que está empeñado en derribar como sea esas leyes del fútbol tan serias, ese insulso decálogo que ni siquiera sabemos quién puso en pie. Yo no sé lo que come el Kun, ni si duerme mucho o poco o si se deja las cejas en la Play; no sé si sale por las noches, ni tampoco sé si mamá le hace ají de chicha y si toma demasiado clericó con los amigos. Lo que sí sé es lo que veo, y lo que veo es que, cuando Javier Aguirre se deja los prejuicios, que a lo mejor son también los nuestros, en su casa, Sergio juega que da gusto. Hay que dejar que el Kun juegue al fútbol, y que nos alegre la vida y que, de paso, le solucione la suya al Atlético de Madrid, que para eso se vino hasta aquí. Hay que dejar que este niño siga haciendo añicos esas sesudas tablas y constantes de la física futbolística. Hay que dejarle que nos lleve la contraria y que, además, se burle de nosotros. Nos lo tenemos merecido.
Aplaudidle. Aplaudámoslo todos. Pero, por favor, no le hagáis más entrevistas.
En fin, hablando de pollitos, hay que ver lo que se parecen a las gallinas las Águilas de America una vez convenientemente desplumadas... Esta noche, cenamos todos Águilas al Ast... Invita Laporta ;) Por cierto Juanma... ¿No estaremos vendiendo de nuevo vaporware futbolero? A ver en que queda todo esto del Kun, porque estoy harto ya de ver diamantes en bruto y eternas promesas. A ver si los unos pasan de una vez por el tallador y los otros cumplen.
Eso que le pides a Aguirre que haga con Agüero habría que pedíselo también al resto de entrenadores que se hiciera con muchos chavales españoles, a los que no se deja debutar en primera división porque son muy jóvenes aduciendo las mismas razones que tú comentas. Chavales con el mismo desparpajo y deshinhibición jugando que el kun, pero a los que esos prejuicios condenan a jugar en los filiales o en segunda B o a estar en el banquillo tanto tiempo, que cuando se considera que tienen la edad suficiente para saltar a primera no sólo han perdido ya toda la insolencia, la alegría y el atrevimiento, sino que a algunos hasta se les ha olvidado jugar al futbol.
atencion amigos: se publican mañana becas de estudio especial para el centro de estabulacion JOSE BLANCO. mas informacion. http://www.hispaniarazonable.com/campoestabulacion.htm
Juanma, como uno de los primeros lectores que tuvo en su nacimiento este blog, me creo con la confianza necesaria para hacerte una observación: usa la diéresis para hablar del Kun Agüero Que los blogueros cometamos "minoyes" de errores no quiere decir que tú, como hacedor de artículos supremo, te los puedas permitir: te lee mucha gente, así que, lo quieras o no, influyes en sus habilidades lingüísticas. ¿Qué tal una fe de erratas? Por último: ¡qué golazo el del pibe ayer!
1/2 En varias películas recuerdo al malo: "las cosas no son blancas ni negras, el mundo es gris" y cosas así. Se refiere a términos morales y es para justificar su inmoralidad. Permítanme sacarlo radicalmente de contexto, porque no voy a decir nada sobre ética. En las cuestiones materiales y humanas, muchas cosas son "grises" o de todos los colores. Por existir existe hasta lo blanco y lo negro. La realidad se compone de detalles, millones de ellos, y para simplificar usamos muchas mañas reduccionistas. Una es la de definir o esbozar o inventar una cualidad y una escala sobre ella, de mínimo a máximo o de cero a infinito, y otra es la de rechazar, usualmente con cajas destempladas, todo lo que no esté directamente en el extremo que más nos gusta, o así nos parezca. A veces se puede afirmar que, objetivamente, ese extremo es el ideal, y otras veces es una cuestión de gustos. Luis Enrique pudo haber sido mediocre en el Madrid pero luego brilló en el Barça, nada más traspasarlo. Simple cuestión de hacerle jugar en su verdadero puesto aunque muchos madridistas sospecharon que no fue cabal. Aplicaron tal vez una escala "del Barcelona - del Madrid" :-D .
2/2 Sobre Kun: Infantil - Adulto Jugador mediocre - Estrella del fútbol (nota: también existen los jugadores "malos", pero rara vez llegan a profesionales, no digamos a la primera división ;-) ). etc A esta segunda le tengo particular manía porque lo más común es aplicarla "en modo extremo" y se queda en una especie de racismo (algunos jugadores son "de la raza elegida" o "cracks" o como los llame cada uno y otros no, simplemente no, Kunta Kinte no es blanco por mucho que corra) o de defensa del Antiguo Régimen (algunos jugadores son duques, condes, barones, hidalgos etc y otros son plebeyos, simplemente plebeyos, por mucho que suden). Su combinación con la otra, infantil - adulto, es letal, no sé si para los jugadores jóvenes en sí o para las expectativas sobre ellos. Partido a partido y no obsesionarse con el "status". No es relevante ni ayuda en el terreno de juego. En el mejor de los casos es la historia anterior y rara vez se habrá calculado con algún método objetivo como éste: status = mérito(actual) + alfa·mérito(hace 1 mes) + alfa^2·mérito(hace 2 meses) + alfa^3·mérito(hace 3 meses) + ... alfa es un número menor o igual a "1". Por tanto alfa, alfa^2, alfa^3 etc son sucesivamente menores. Cuanto menor sea alfa, más rápidamente olvidamos méritos pasados. Con alfa = 1 nos da igual si el mérito es de hace 10 años o del último partido, y con alfa = 0 sólo tenemos en cuenta lo último.