1) Es sin duda digno de estudio el denodado esfuerzo que muchos medios de comunicación de titularidad española han demostrado a la hora de editorializar a favor del reconocimento pleno que merecía el Mundial logrado por Alemania y de la justicia que representaría que el Balón de Oro fuera para Manuel Neuer. No han ahorrado energías, no, y hasta el último instante estuvieron filtrando que se temían lo peor, que a la vista está que para ellos era sin duda lo mejor. Pues no: fue lo peor para ellos y lo mejor para Cristiano, que consigue su tercer galardón, y por extensión para todo el madridismo. Otra vez será.
2) Esta moda de vincular Mundial y Balón de Oro es tan reciente como las declaraciones de Blatter y de Platini. Quienes crearon el premio (y no hay más que echarle un vistazo a los primeros jugadores que lo obtuvieron) no estaban pensando ni por asomo en el Mundial. Se da, además, la gran paradoja de que ayer Joachim Löw fue elegido como el mejor entrenador del año pasado y Cristiano Ronaldo fue votado como el mejor jugador cuando el primero conquistó el Mundial de Brasil y el segundo pasó sin pena ni gloria de la mano de Portugal. A mí Low me parece un fantástico entrenador pero no es lo mismo dirigir durante 7 partidos que durante 70 y creo que tanto Ancelotti como Simeone lo merecieron más.
3) Recuerdo cuando se decía que la mala suerte que había tenido Cristiano era la de ser coetáneo de Messi. Yo siempre sostuve la tesis contraria y defendí desde el principio que era justo al revés. Messi hace mejor jugador a Cristiano, le motiva tenerle enfrente. En cualquier otra circunstancia Leo se habría paseado y, al final de su carrera, habría ganado todos los títulos individuales posibles, pero hete aquí que se ha topado con una máquina de la competición, un deportista que vive para y por el fútbol las veinticuatro horas, un "enfermo" de este juego que no podía consentir que Messi le ganara por 4-1. Desde anoche ya llueve menos porque el marcador entre ellos es de 4-3.
4) Otra diferencia entre Cristiano y Messi: el portugués acababa de agarrar su tercer Balón de Oro y ya estaba pensando en el cuarto. Dirigéndose al argentino dijo: "Voy a por ti". Leo tiene lo que le falta a Cristiano y Ronaldo posee lo que no tiene Messi. Por eso Cristiano insiste tanto en el "día a día" como clave de su éxito personal, que ayuda por supuesto al colectivo del equipo. En ese "día a día" Ronaldo simplemente no tiene competencia.
5) Quiso la casualidad que el encargado de dirigirle su mensaje de ánimo a Messi fuera su actual entrenador, Luis Enrique, con quien como todo el mundo sabe (salvo Mascherano) no se lleva nada bien. Hubo un periodista que, al final de la gala, probablemente más ocupado en dejarle claro al jugador que él era de los suyos, le soltó a Messi: "Fíjate que incluso se ha discutido sobre tu reacción a la hora de recibir el saludo de Luis Enrique, ¡no puedes hacer nada!"... Pues a mí, querido colega, qué quieres que yo te diga, sí me parece harto significativo que Messi pusiera una cara de funeral de tercera cuando quien le habló fue su entrenador y, en el mismo plano-secuencia, pasase de repente a convertirse en la felicidad personificada cuando quien le sorprendió fue Pablo Aimar. Interpreto que Messi eligió no fingir, así de simple.
6) Hoy ya nadie cuestiona que Cristiano vale los 96 millones de euros y punto que el Real Madrid pagó por él en 2009. Ahora, en 2015, es fácil decirlo pero hace 5 años era un pelín más complicado. Gareth Bale, quien por cierto felicitó vía redes sociales al portugués nada más conocer la feliz noticia, está llamado a ser el futuro jugador franquicia del club y creo que será tan barato como lo fue Cristiano en su día. Lo mismito que se dice ahora del galés se dijo de Ronaldo nada más llegar aquí, lo mismito. Espero que las aves de mal agüero se lleven un disgusto similar.
7) Me alegro también por James, a quien el comité de bienvenida que tienen habitualmente preparado en España todos los jugadores que se atreven a fichar por el Real Madrid le advirtió de las terribles consecuencias que podía acarrearle su temeraria decisión. James, que venía a hacer negocio para ACS en Colombia, encaja como un guante en el club blanco y su gol del Mundial fue elegido como el de más bella factura de todo el año pasado. Felicidades.
8) No creo en absoluto que Leo Messi haya sido uno de los tres mejores futbolistas del año 2014. Y si me sorprendió su inclusión en la terna de candidatos, más aún lo hizo el que acabara segundo por delante de Neuer, que según algunos medios de comunicación de titularidad española era claramente merecedor de llevarse el primer premio por su grandísimo Mundial y por el histórico 0-4 de Múnich. Tampoco creo que Messi fuera el mejor jugador del Mundial. Infiero de todo ello que a Leo le premian simplemente por ser quien es, por estar ahí, y eso es a lo mejor así porque a la intelligentisa le interesa trasladar a la gala del Balón de Oro la rivalidad entre Real Madrid y Barcelona para que haya alguien delante de la tele: Show me the money!...
9) Sigue la maldición de los porteros. Únicamente Yashin, y ya hace de aquello más de medio siglo, ganó un Balón de Oro por impedir goles en vez de por marcarlos. Diera la impresión de que el mundo del fútbol tratara a los porteros como a una especie en extinción, un fenómeno al margen del juego colectivo, una figura con la que necesariamente hay que convivir... pero poco más. Y es injusto. No me refiero, por supuesto, al caso de Neuer de 2014 porque el mejor fue indiscutiblemente Cristiano, pero llama la atención que la figura del portero, que es el único especialista, no sea tenida en cuenta. Cuanto más tarden en otorgarle el Balón de Oro a un portero, más difícil resultará. Aún así ya es tarde para Zoff, Kahn y probablemente también para Casillas o Buffon.
10) Ni un minuto tuvo libre la FIFA para recordar a Alfredo Di Stéfano, ganador de dos Balones de Oro y del único Súper Balón de Oro que se ha entregado a fecha de hoy. Ni un minuto. Eso sí, no faltó el rockero con la guitarrita de marras. A ver si hay suerte y en la próxima gala de los Grammy los rockeros le mandan para compensar un saludito a la Saeta Rubia.