Ha sido rozar un poquito, nada, una leve caricia casi, al Simeone de Oro, y sus adoradores de Libertad Digital y de EsRadio, encabezados por Tomás Cuesta, Gonzalo Heredero y Petón, han salido corriendo por los pasillos gritando "¡Anatema, anatema, anatema!"... Más que atlética legión esto parece, la verdad, rojiblanca inquisición, y yo, qué quieren que les diga, ya empiezo a notar cómo me suben por los pies las llamas del fuego purificador, que a buen seguro purificará, no lo pongo en duda, pero que también quema, qué narices. Así como Robespierre era El Incorruptible, Simeone es para mis amigos legionarios del Atleti El Intocable... ¡Y todo por atreverme a decir que el fichaje de Jackson Martínez, el más caro de la historia del equipo colchonero, es un fracaso atribuible a su entrenador!... ¿A quién si no? ¿A mí? ¿A Florentino, que llamó a Aznar, que llamó a Gallardón, que llamó al fiscal para que fracasara el colombiano? ¿Habrá sido Mourinho el responsable final del fracaso deportivo de Jackson?...
A confesión de parte relevo de pruebas. Fue ayer el propio Simeone quien, tras haber leído muy probablemente El Penúltimo Raulista Vivo, entró al fin en razón y reconoció con todo el dolor de su corazón su evidentísimo fracaso con Jackson Martínez. Quedo a la espera de que Tomás Cuesta dedique su próximo artículo a arremeter contra Simeone, supongo que la noticia de la confesión no le habrá llegado aún, pero el caso que me preocupa realmente es el de Gonzalo Heredero; Gonzalo sí conocía las declaraciones del Cholo y, aún así, dedicó su Remate de El Primer Palo de ayer... a sacudirme a mí de nuevo: ¡pero si Simeone me está dando la razón! ¡Pero si Simeone está reconociendo que fracasó con Jackson!... Mi artículo del otro día iba sobre eso, sobre el "caso Jackson" y su huída a China tras marcar 3 goles en siete meses... Según Simeone el responsable del fracaso es Simeone: ¿Le mandaréis también a él a la hoguera o preferís empezar conmigo que soy más bajito y consumo menos leña?
Esta reacción de la Rojiblanca Inquisición demuestra, por ejemplo, que los atléticos tienen la piel muy fina, demasiado. No hay más que leer algunos de los comentarios del blog de Tomás Cuesta para darse cuenta de esto que digo. Y tienen la piel muy finita y delicadita porque están acostumbrados a vivir a la sombra mediática del Real Madrid, que es el club de fútbol que se lleva todos y cada uno de los palos; al Real Madrid el periodismo deportivo le pega por subir y por bajar, por entrar y por salir, por llegar temprano o por hacerlo tarde, por elegir el camino de la derecha o decantarse por el de la izquierda. Ha sido, por cierto, el Simeone de Oro el que, lejos de abrirse camino a codazos como sí hizo, por ejemplo, Radomir Antic, ha fomentado ese dolce far niente periodístico. Los éxitos de Diego Simeone como entrenador son incontables, pero con Jackson, amigos míos, la cagó. No pasa nada por decirlo. El Cholo acaba de dar un pequeño paso para él pero que es muy grande para los atléticos; ahora sólo falta que pida perdón al Real Madrid y a sus aficionados por sugerir que esta Liga está vendida al mejor postor.