Colabora


El penúltimo raulista vivo

Cuestión de confianza

Hace bien Fabio Capello al no fiarse de su ex jugador David Beckham. Yo, por ejemplo, no me fío de Fabio Capello y continúo creyendo que si aceptó la oferta que le hizo en su momento Ramón Calderón fue única y exclusivamente porque iban a descender a la Juve a la Serie B italiana. Cuando todavía no se temían lo peor para la Juve, Fernando Martín le tiró el anzuelo a Capello y éste, muy amablemente por su puesto, faltaría más, mandó al Madrid a freir espárragos. Después juró amor eterno a la "vecchia signora" e incluso llegó a afirmar que él estaba trabajando para que la Juve ascendiera de categoría. Luego, tras oír lo que fueron a decirle Mijatovic y Baldini a la paradisíaca isla de Pantelleria, Capello siguió negando la mayor, pero eso fue debido a que, por aquel entonces, Calderón no era aún presidente del club sino sólo uno de los cinco candidatos, y el italiano, que no tiene ni un pelo de tonto, no quería hipotecarse con nadie: ¿para qué decirle que sí a alguien que luego podía perder? Lo que acabó de convencer del todo a Capello no fue el "proyecto deportivo" sino el hecho de que el 2 de julio Calderón sacara un puñado de votos más que Juan Palacios.
De forma que Capello, y regreso así al principio, hace bien en no fiarse de Beckham. Por lo que me dicen hay un sector mayoritario de jugadores que tampoco se fían de su entrenador. Eso es lo que mejor define la situación que se vive ahora mismo en el club: desconfianza. Capello recela de Beckham, algunos jugadores no se fían de Capello, Mijatovic desconfía de la implicación de determinados futbolistas e incluso algunos palmeros de Calderón empiezan a apartarse de él no vaya a ser que les tizne. A todo esto, Beckham observa lo que ocurre aquí abajo, en este insignificante trocito del planeta Tierra, cómodamente instalado en ese Everest que se ha fabricado con los doscientos millones de euros que ganará en Los Angeles Galaxy, su nuevo club. Ahora tiene seis meses por delante para hacer un poquito de jogging en Valdebebas y acompañar a la Spice pija cuando ésta decida pedirle a Bautista el Cayenne para irse de compras a la milla de oro madrileña, ésa que no huele a ajo sino a Chanel del número cinco.
Capello va deshaciéndose de jugadores a medida que se acerca el final de la temporada. Prometió que se vería el mejor Real en cincuenta días y, cuando ya han transcurrido más de ciento veinte, el equipo sigue sin jugar absolutamente a nada. Fabio dijo el otro día que "cuando ganamos, ganamos todos, y cuando perdemos, perdemos todos también", pero aún no le he visto reconociendo ni una sóla vez que él se haya confundido. Dejándole fuera del equipo, Capello está gritando a los cuatro vientos que ya no se puede confiar en un jugador que dice públicamente en el mes de enero que no va a seguir. Es posible, sólo posible, que el momento escogido para el anuncio no haya sido el mejor. Pero, si me dan a elegir, yo me fío mucho más de alguien que advierte con tiempo suficiente que se va a marchar, que no de alguien que te deja tirado con dos años más de contrato firmados.

Lo más popular

  1. Vídeo: Álvarez de Toledo vuelve a arrollar a Bolaños, el "ministro gutural" del "ultra, ultra, facha, facha"
  2. Campaña de bulos contra Federico Jiménez Losantos a cuenta de la muerte de Marisa Paredes
  3. Vídeo: Bolaños pierde la compostura en el Congreso
  4. Begoña Gómez declara por primera vez ante Peinado y culpa a la Complutense: ella actuó "sin ánimo de lucro"
  5. Raphael, ingresado en el hospital tras sufrir un accidente cerebrovascular grabando el programa de Broncano

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario