Marca hizo por la mañana justicia al entregarle a Messi el premio al máximo goleador y a Cristiano el del mejor jugador. Uno puede haber marcado más goles que nadie pero no haber sido ni el mejor ni tampoco el más decisivo, que es lo que yo creo que sucedió con el futbolista argentino del Barcelona. El mejor para el diario Marca fue, como digo, Cristiano, distinción que la Liga de Fútbol Profesional travestiría tan sólo unas cuantas horas más tarde otorgándole al delantero portugués el trofeo del jugador más valioso de la pasada temporada. Lo más llamativo de la gala, porque lo cierto es que el resto de la noche pasó sin pena ni gloria y todo el mundo estaba esperando al duelo entre los dos cracks, fue que se considerase a Messi mejor delantero y mejor jugador. Mejor delantero vale, pero... ¿mejor jugador? ¿Mejor jugador cuando luego vas a elegir a Cristiano como el jugador más valioso?...
El acabose llegó cuando me enteré de que el premio de la LFP a Cristiano Ronaldo (o sea, el del jugador más valioso pero no el mejor) era fruto de introducir en la coctelera nada más y nada menos que treinta y dos estadísticas distintas. Estadísticamente hablando Cristiano fue el mejor, pero desde el punto de vista humano lo fue Messi, aunque únicamente por la noche porque para Marca el mejor fue Cristiano por la mañana. Del factor humano tiendo yo a fiarme más bien poco desde que a Raúl le hurtaron el Balón de Oro y mucho menos desde que Mourinho, conocido mundialmente por no dar puntada sin hilo, denunció que todo era un tangazo, tal y como luego quedó oportunamente constatado.
Así que Messi fue elegido como el mejor y, como diría mi amigo Rodrigo Jiménez, Ronaldo fue designado como el "más mejor", que es lo que yo creo que significa ser el más valioso. Por cierto que a Cristiano, que lleva yendo los últimos cuatro años a la gala del Balón de Oro para ver cómo un año, y otro más, y otro, y otro más el premio se le entrega a Messi, le critican con dureza... ¡que no acuda a la gala!... El lunes Messi dejó colgado al Marca por la mañana y a la LFP por la noche y el asunto de su desplante ha sido oportunamente borrado de la hemeroteca. Yo sí creo que a un futbolista, por muy estrella que sea o precisamente por eso mismo, hay que exigirle algo más, por ejemplo que no se trabe. Que yo sepa tampoco se le exigió que dijera del tirón y sin respirar supercalifragilísticoespialidoso sino sólo BBVA.