L D (EFE) Durante los primeros cinco minutos, el Hamburgo presionó en el área rojilla y pudo adelantarse en el marcador con dos disparos dentro del área de Kompany y de Guerrero, las dos nuevas incorporaciones del conjunto alemán para esta temporada. A medida que transcurrieron los minutos, Osasuna fue ganando en seguridad y, arropado por los cánticos del millar de aficionados rojillos desplazados a Hamburgo, fue controlando el ritmo del encuentro, lo que le permitió adelantar su línea de presión y poner en aprietos al meta rival Kirschstein.
Un centro de Raúl García desde la banda derecha (m.18) y un disparo desde dentro del área de Soldado, previa jugada personal (m.23), incrementaron el temor de los alemanes, que veían como Osasuna iba ganando terreno en el campo mientras sus hombres fuertes, Mahdavikia y De Jong, apenas hacían acto de presencia en el choque. Cuando apenas restaban cinco minutos para el final de la primera mitad, un alegría momentánea templó los ánimos de los rojillos cuando Cuéllar mandó a la red un lanzamiento de falta de Delporte, que finalmente Henning anuló por fuera de juego del central osasunista.
Con la reanudación, el Hamburgo incrementó su presión sobre el conjunto navarro, que se apoyó en la seguridad del meta Ricardo, quien ayudado por Flaño impidió que los alemanes se adelantaran en el marcador, así como de los centrales Cuéllar y Josetxo, que despejaron cada balón que se colaba en el área. Osasuna, que viajó a Alemania con las bajas del camerunés Webó, recuperándose de una malaria, y de los porteros Elía, por sanción, y Penedo, lesionado, logró mantener la puerta a cero merced al acierto de Ricardo, que una vez más aportó seguridad al conjunto navarro.
La mala fortuna en los remates a puerta fue otra de las características de los de Ziganda, ya que Soldado, primero, y Milosevic después, tuvieron en sus botas el gol que hubiera aportado confianza en el conjunto pamplonica con vistas a la vuelta, que ya esperan en el Reyno de Navarra.
Un centro de Raúl García desde la banda derecha (m.18) y un disparo desde dentro del área de Soldado, previa jugada personal (m.23), incrementaron el temor de los alemanes, que veían como Osasuna iba ganando terreno en el campo mientras sus hombres fuertes, Mahdavikia y De Jong, apenas hacían acto de presencia en el choque. Cuando apenas restaban cinco minutos para el final de la primera mitad, un alegría momentánea templó los ánimos de los rojillos cuando Cuéllar mandó a la red un lanzamiento de falta de Delporte, que finalmente Henning anuló por fuera de juego del central osasunista.
Con la reanudación, el Hamburgo incrementó su presión sobre el conjunto navarro, que se apoyó en la seguridad del meta Ricardo, quien ayudado por Flaño impidió que los alemanes se adelantaran en el marcador, así como de los centrales Cuéllar y Josetxo, que despejaron cada balón que se colaba en el área. Osasuna, que viajó a Alemania con las bajas del camerunés Webó, recuperándose de una malaria, y de los porteros Elía, por sanción, y Penedo, lesionado, logró mantener la puerta a cero merced al acierto de Ricardo, que una vez más aportó seguridad al conjunto navarro.
La mala fortuna en los remates a puerta fue otra de las características de los de Ziganda, ya que Soldado, primero, y Milosevic después, tuvieron en sus botas el gol que hubiera aportado confianza en el conjunto pamplonica con vistas a la vuelta, que ya esperan en el Reyno de Navarra.
Hamburgo, 0 : Kirschstein, Reinhardt, Demel, Mahdavikia, Guerreo, Kompany, Jarolim, Trochowski (Lauth, m.73), Sanogo, Van der Vaart, de Jong
Osasuna, 0 : Ricardo, Monreal, Josetxo, Javier Flaño, Cuéllar, Raúl García, Puñal, Delporte (Valdo m.69), David López, Soldado (Romero m.78), Milosevic (Nekouman m.88)
Árbitro : Tom Henning Ovrebo (Noruego). Amonestó a Trochoswski (m.20) por el Hamburgo y a Cuéllar (m.33), Josetxo (m.35), Delporte (m.63) y a David López (m.88) por parte de Osasuna
Incidencias : partido de ida de la fase previa de la Liga de Campeones disputado en el estadio AOL Arena de Hamburgo ante 50.000 espectadores. Un millar de aficionados navarros viajaron hasta Hamburgo para presenciar el encuentro.