L D (EFE) El barco español pasó la meta volante del Cabo de Hornos y viró hacia el Norte para, posteriormente, tomar rumbo Noroeste por el canal de Beagle hasta el puerto argentino, navegando a unos 10 nudos (18 Km/h.) para no forzar el casco y agravar la avería con el abundante oleaje de la zona. El patrón del barco, Bouwe Bekking, ha explicado que "la conexión de los hidráulicos a la cabeza de la quilla esta sellada por paneles (panes) de goma y el agua está intentando entrar a través de ellos. Por suerte teníamos paneles de reserva y fueron instalados como medida de seguridad adicional"
"Me siento muy feliz por haber colocado peso adicional en esta área", añadió, "porque ha respondido bien incluso bajo una enorme presión de agua. Esto ha provocado buenas sensaciones en todos nosotros porque sabemos que aún podemos luchar por mantener el segundo o el tercer puesto de la general absoluta. Esa es ahora nuestra meta y vamos a trabajar duramente para conseguirla". A pesar de todos los problemas, el patrón del barco español se siente satisfecho: "En esta etapa ya hemos demostrado que podemos competir al máximo nivel y aspirar a todo. En las últimas 24 horas antes del percance logramos la mayor velocidad de toda la flota con 549.7 millas (1018 Km.) y creo que estábamos en condición de mejorarla más sino hubiésemos tenido la avería".
"Vamos a sacar el barco del agua, evaluar todos los daños, repararlos y volver a la prueba. El Desafío Español de Copa Amércia nos ha vuelto a prestar su ayuda con técnicos de su equipo de construcción dirigidos por Javier Mendez y quiero darles las gracias por estar aquí en un tiempo récord. También a los técnicos locales Roxana Diaz y Jonothan Selby, que lo han preparado todo para los trabajos", dijo. El barco español fue acompañado por una unidad de la marina de guerra chilena y, posteriormente, por otra de la marina argentina a mitad del canal de Beagle, que lo llevó hasta el puerto.
"Me siento muy feliz por haber colocado peso adicional en esta área", añadió, "porque ha respondido bien incluso bajo una enorme presión de agua. Esto ha provocado buenas sensaciones en todos nosotros porque sabemos que aún podemos luchar por mantener el segundo o el tercer puesto de la general absoluta. Esa es ahora nuestra meta y vamos a trabajar duramente para conseguirla". A pesar de todos los problemas, el patrón del barco español se siente satisfecho: "En esta etapa ya hemos demostrado que podemos competir al máximo nivel y aspirar a todo. En las últimas 24 horas antes del percance logramos la mayor velocidad de toda la flota con 549.7 millas (1018 Km.) y creo que estábamos en condición de mejorarla más sino hubiésemos tenido la avería".
"Vamos a sacar el barco del agua, evaluar todos los daños, repararlos y volver a la prueba. El Desafío Español de Copa Amércia nos ha vuelto a prestar su ayuda con técnicos de su equipo de construcción dirigidos por Javier Mendez y quiero darles las gracias por estar aquí en un tiempo récord. También a los técnicos locales Roxana Diaz y Jonothan Selby, que lo han preparado todo para los trabajos", dijo. El barco español fue acompañado por una unidad de la marina de guerra chilena y, posteriormente, por otra de la marina argentina a mitad del canal de Beagle, que lo llevó hasta el puerto.