L D (EFE) Efectuar la reparación era ineludible y la tripulación española calcula perder unas 30 millas (54 Km.) con respecto a sus rivales en la salida, una diferencia fácilmente recuperable en una singladura de casi 20 días. En esta etapa, la más dura de toda la prueba, están en juego 10,5 puntos (7 por ganar y 3,5 de la meta volante del Cabo de Hornos). El ABN Amro 1 de Mike Sanderson lidera la general con 38,5 puntos, seguido del ABN Amro 2 de Sebastián Jossé, con 28, y el Movistar es tercero con 25 y confía que en esta etapa ya podrá superar al segundo barco holandés y recortar distancias con el líder.
El Movistar fue sacado del agua y trasladado a un astillero (marina) donde se han reparado ya los portones que sellan la abertura de la quilla pivotante, que estaban arrancadas del casco, y se están finalizando las reparaciones de los daños en la abertura de salida de la orza de babor. El constructor Peter Britt ha señalado que los trabajos han sido satisfactorios y el jefe del equipo de tierra, Fred Barrett, que ayer llegó a Wellington trayendo un cierre nuevo del tablero de la orza y el portón nuevo de sellado de la quilla, ya ha instalado y verificado ambas piezas.
En las otras cinco embarcaciones que tomarán la salida, ya que el Brunel australiano, que no participó en la tercera etapa, no volverá a la competición hasta finales de abril en Baltimore, hay un ambiente de tranquilidad pero con tensión contenida ante la salida de mañana, en la que todos se juegan mucho. Donde hay más nerviosismo y algo de euforia es en el Brazil 1 de Torben Grael, donde está el coruñés Roberto Bermúdez de Castro. El bicampeón olímpico brasileño ha señalado que "la llegada a Brasil será el momento más grande de la aventura nacional emprendida en la prueba. Es, sin duda", añadió, "la etapa más dura, pero también la más importante para nosotros porque vamos a llegar a casa y cruzar la bahía de Guanabara en una buena posición será la coronación de nuestro trabajo".
Solo habrá dos cambios en las tripulaciones por lesiones sufridas en la tercera etapa. El proa holandés del ABN Amro 2, Gerd Jan Poortman, sufrió una grave brecha en la cabeza al ser arrastrado por una ola y chocar contra la orza del barco. Llegó a Wellington postrado en la cama y será relevado por el brasileño Lucas Brun. En el Pirates of Caribbean del estadounidense Paul Cayard, el canadiense Curits Blewett, miembro del equipo Alinghi de Copa del América y que iba a competir con el "Pirates" hasta el final de la cuarta etapa, ha debido ser reemplazado, debido a un fuerte golpe en la pierna, por el neozelandés Jeremy Smith del equipo de tierra.
Unicamente el Movistar dejará su base en el muelle de Queens dos horas después de los demás barcos ya que ni los dos ABN Amro, ni el Pirates de Paul Cayard, tercero en la tercera etapa, ni el Brazil 1 de Torben Grael han decidido tocar los barcos en la parada técnica de Wellington para no incurrir en penalización. El Ericsson de Neal Mc Donald sí ha reparado su barco pero se ha acogido al reglamento y no ha sido penalizado, ya que hasta esta madrugada no ha cruzado oficialmente la línea de meta de la tercera etapa, 48 horas después de la llegada del Movistar, ganador de la etapa.
El Movistar fue sacado del agua y trasladado a un astillero (marina) donde se han reparado ya los portones que sellan la abertura de la quilla pivotante, que estaban arrancadas del casco, y se están finalizando las reparaciones de los daños en la abertura de salida de la orza de babor. El constructor Peter Britt ha señalado que los trabajos han sido satisfactorios y el jefe del equipo de tierra, Fred Barrett, que ayer llegó a Wellington trayendo un cierre nuevo del tablero de la orza y el portón nuevo de sellado de la quilla, ya ha instalado y verificado ambas piezas.
En las otras cinco embarcaciones que tomarán la salida, ya que el Brunel australiano, que no participó en la tercera etapa, no volverá a la competición hasta finales de abril en Baltimore, hay un ambiente de tranquilidad pero con tensión contenida ante la salida de mañana, en la que todos se juegan mucho. Donde hay más nerviosismo y algo de euforia es en el Brazil 1 de Torben Grael, donde está el coruñés Roberto Bermúdez de Castro. El bicampeón olímpico brasileño ha señalado que "la llegada a Brasil será el momento más grande de la aventura nacional emprendida en la prueba. Es, sin duda", añadió, "la etapa más dura, pero también la más importante para nosotros porque vamos a llegar a casa y cruzar la bahía de Guanabara en una buena posición será la coronación de nuestro trabajo".
Solo habrá dos cambios en las tripulaciones por lesiones sufridas en la tercera etapa. El proa holandés del ABN Amro 2, Gerd Jan Poortman, sufrió una grave brecha en la cabeza al ser arrastrado por una ola y chocar contra la orza del barco. Llegó a Wellington postrado en la cama y será relevado por el brasileño Lucas Brun. En el Pirates of Caribbean del estadounidense Paul Cayard, el canadiense Curits Blewett, miembro del equipo Alinghi de Copa del América y que iba a competir con el "Pirates" hasta el final de la cuarta etapa, ha debido ser reemplazado, debido a un fuerte golpe en la pierna, por el neozelandés Jeremy Smith del equipo de tierra.
Unicamente el Movistar dejará su base en el muelle de Queens dos horas después de los demás barcos ya que ni los dos ABN Amro, ni el Pirates de Paul Cayard, tercero en la tercera etapa, ni el Brazil 1 de Torben Grael han decidido tocar los barcos en la parada técnica de Wellington para no incurrir en penalización. El Ericsson de Neal Mc Donald sí ha reparado su barco pero se ha acogido al reglamento y no ha sido penalizado, ya que hasta esta madrugada no ha cruzado oficialmente la línea de meta de la tercera etapa, 48 horas después de la llegada del Movistar, ganador de la etapa.