L D (EFE) En una nota oficial, el club señala que adoptó esa decisión "como ejercicio de responsabilidad en defensa de nuestro jugador Juan Fernando Arango, que vivió una situación crítica". Agrega que "tras visionar varias veces todas las imágenes proporcionadas por las diferentes televisiones y reporteros gráficos, consideramos que la jugada en la que resultó agredido nuestro jugador traspasa todos los límites aceptables de los lances habituales en el fútbol de competición, produciéndose en ella el jugador rival con una violencia que excede lo que puede considerarse normal en la defensa de los intereses de su club".
Añade que el consejo "deplora profundamente, reflejando lo que han expresado en el día de hoy (por este lunes) innumerables medios de comunicación de toda España, esta forma de practicar deporte buscando siempre el límite del Reglamento, que puede dar lugar a riesgos para la salud e incluso la vida de los deportistas".
Puntualiza que "consideramos que existiendo una conciencia política y social generalizada en nuestros días de lucha contra la violencia en los espectáculos deportivos, cuyo último eslabón ha sido la firma el pasado viernes del Protocolo contra el Racismo, esta lucha no debe limitarse sólo a los comportamientos verbales o físicos de los espectadores o aficionados, sino que debe extender todos sus efectos, y de forma ejemplar, también a lo que sucede en el terreno de juego".