(Libertad Digital) Crónicas de los partidos que los conjuntos españoles han disputado este jueves correspondientes a la cuarta jornada de la Euroliga:
REAL MADRID 76 - OLYMPIACOS 62
Los puntos de Axel Hervelle, su entrega, trabajo defensivo, sacrificio reboteador y sentido de equipo disparó a los blancos (14-5) contra un rival que, por ahora, sobrevive gracias a lo que arranca fuera de su pista, aunque sea de vista en la cancha del Cibona croata, porque todavía no sabe lo que es ganar en Atenas. El Olympiacos modificó su línea interior en cuanto sintió que el peligro llegaba por esa zona y no desde el perímetro y, a partir de ese cambio, consiguió abrirse hueco paulatinamente después de perder el primer cuarto (20-15). Los griegos acomodaron la defensa, usaron al estadounidense Marque Perry para manejar el juego en transición y, ayudados por el descenso de la eficacia local en el tiro, llegaron al descanso en pie de igualdad (34-32).
El estadounidense Louis Bullock evitó que el Madrid acabase por detrás con una cesta sobre la bocina del intermedio. Antes también había dado respuesta a unas cuantas salvas atenienses que amenazaban con variar el signo del tanteador. El Olympiacos insistió en la zona y el estadounidense Lavor Postell culminó la apuesta ateniense con la primera ventaja visitante en pleno fragor del tercer cuarto, pero el Madrid aguantó el tipo y, a pesar de los errores desde la línea de personal, salió del tercer corte en tablas (50-50). El esloveno Ivica Jurkovic acrecentó la confianza del Olympiacos. Le colocó por delante 50-52 pero Bullock asumió la responsabilidad sin pestañear desde el pistoletazo del último cuarto. El Madrid recuperó el dominio gracias a él para entrar en los cinco últimos minutos por delante (59-58), aunque todavía acuciado por los rojos. Sometido a la presión, el Madrid dio una respuesta inapelable, aunque no sólo a través de Bullock. El francés Moustapha Sonko y su compatriota Mickael Gelabale, el primero con un triple (68-61) y el segundo con un 'alley-hoop' descomunal (70-61), conjuraron el acoso griego y permitieron que los blancos cubriesen los dos últimos minutos sin agobios.
BARCELONA 98 - ZALGIRIS KAUNAS 102
El Barcelona perdió su condición de invicto en la Euroliga en la cuarta jornada de la primera fase y lo hizo en su propia pista, el Palau Blaugrana, ante el Zalgiris Kaunas, que fue mejor que su rival en el terreno donde mejor se desenvolvía hasta hace poco, los últimos minutos de partido. Y eso que los barcelonistas reaccionaron, después de mostrarse incapaces de meterse en el partido durante todo el primer cuarto, en el que sus rivales anotaron con tanta facilidad que rápidamente comenzaron a encadenar máximas diferencias de consideración. Al término del primer cuarto, el marcador reflejaba un 16-28 que provocó la reacción azulgrana en el siguiente periodo, en el que los jugadores de Joan Montes borraron a su rival de la pista.
Los barcelonistas fueron minando a su rival hasta que Dejan Bodiroga equilibró los guarismos en el minuto 20 (45-45) y todavía hubo tiempo para dos robos de balón que culminaron en tiros libres anotados por Ilievski y en una canasta de tres puntos sobre la bocina de Bodiroga que dejó las cosas en 50-45 al descanso. En la reanudación, el Barcelona administró con solvencia la renta obtenida e, incluso, le complicó más las cosas a su rival con la cuarta falta de Tanoka Beard. El último periodo comenzó con el Barcelona sin decidir el partido y su rival sin meterse de lleno en la lucha por la victoria hasta que unos momentos de despiste de los de Montes y de inspiración de los pívots de Sireika restablecieron el empate en el marcador (82-82, min.35). Un triple de Ilievski en el último minuto sirvió para reducir las diferencias a un punto (95-96) y entrar en el intercambio de faltas entre los que tenían que parar el crono y los que debía impedir un tiro de 6.25 metros del rival del que salió ganador el Zalgiris (98-102).
CIBONA ZAGREB 85 - ADECCO ESTUDIANTES 78
El Estudiantes no pudo sumar su segunda victoria en la Euroliga al caer derrotado en la cancha del Cibona de Zagreb de un extraordinario Marko Popovic, estrella de su equipo en este duelo, en el que anotó 39 puntos, fundamentales para un apretado final en el que los croatas se mostraron más fríos. Estudiantes llegó a Cibona con la necesidad de encarrilar su periplo europeo y comenzó el encuentro muy acertado en ataque. Con el marcador igualado saltaron los jugadores a la pista en el segundo cuarto, similar al primero en cuanto a las imprecisiones en los pases de Estudiantes y el protagonismo de Popovic, y con el panameño Rubén Garcés utilizando su fortaleza para hacerse el dueño de la zona rival y marcar las diferencias.
El tercer cuarto continuó con la misma dinámica mostrada hasta entonces por ambos equipos, con una cada vez más brillante actuación del base croata. Pero curiosamente el último y definitivo cuarto no estuvo dominado por la brillante actuación de Popovic, que se resintió del esfuerzo desarrollado, momento en que Longin apareció para llevar a su equipo hacia el triunfo. El marcador final (85-78) resultó más abultado de lo que ambos equipos demostraron a lo largo del partido, pero que reflejó la mala selección en los tiros realizados por los estudiantiles todo el encuentro y que en los momentos decisivos perpetuaron lo que resultó la condena para el equipo madrileño.