(Libertad Digital) Toda la semana previa gira en torno a Ronaldo. Tras el varapalo que se llevó el Madrid en Mallorca, López Caro lo tenía claro, y el brasileño estaba sentenciado. Hace unas horas contaba con muy pocas opciones de estar en Londres, pero conforme llega la hora del partido parece que sí tiene alguna más de ser titular. Ronaldo no está en buena forma, y eso es evidente. Pero sí es cierto que en un partido decisivo hay nombres que meten miedo. Seguramente que Senderos, el joven central del Arsenal de origen alcarreño, cuando vea delante el dorso de la camiseta con el nombre de Ronaldo sentirá más presión. Sólo por eso puede dudar López Caro.
El Madrid no cuenta con un nueve nato detrás de Ronaldo. Soldado es el único, pero no está dentro de los veinte convocados.Su recambio natural el sábado ante el Atlético de Madrid fue Antonio Cassano. La aventura le salió bien a Juan Ramón López Caro. Siempre se ha visto a Cassano de segunda punta en la Roma, con un eficaz uno contra uno. López Caro tendrá que elegir. Entre el italiano, con hambre de títulos, y el brasileño, 'picado' y motivado por ponerse en duda su capacidad. El festival que ofreció Thierry Henry en el Bernabéu preocupa al Madrid. El francés es uno de los pocos delanteros en la actualidad con facultades para ganar él solo un partido. Su golazo de la ida lo refrendó el pasado sábado en casa del Fulham, con otro cambio de ritmo en el área y un golpeo violento a la pelota que acabó en la red. Era el 0-1 de un partido que acabó en goleada (0-4).
El gran damnificado en la defensa del Madrid es últimamente Álvaro Mejía. López Caro, tras el lío que armó Henry en Madrid, ha confiado un sitio en el centro de la zaga a Raúl Bravo. Confía López Caro en la rapidez de Bravo al lado de Sergio Ramos. Otra de las dudas es conocer el lateral derecho. Míchel Salgado y Cicinho pelean por un sitio, aunque es el brasileño quien se perfila como titular. El Madrid necesita gol. Pero si López Caro ve el vídeo de la ida, es claro que José Antonio Reyes jugó muy cómodo con Cicinho en el campo. Con Salgado en el césped, Reyes, de entrada, podría tener más problemas en pisar el área. A Londres, el Real Madrid se desplazaba con veinte futbolistas, incluidos Helguera y Zidane.
El francés se encuentra recuperado de sus molestias físicas. Y el objetivo del Real Madrid debe de ser encarar el costado izquierdo del Arsenal donde el Flamini es el elemento más flojo, el más accesible de todo el equipo. No tiene la culpa Flamini. Él es un medio centro que de forma coyuntural ha situado Arsene Wenger en esa zona ante la plaga de lesiones que asuelan la zaga del club inglés. El Madrid debe aprovechar su lado más débil. No se ha recuperado aún Ashley Cole. Va a pasar un año en blanco. Tampoco Clichy está listo y Wenger hace milagros y juegos malabares para sacar un once digno, pues Campbell, el central internacional inglés, y Lauren, habitual lateral derecho, siguen todos lesionados. No ha podido Wenger rehabilitar a ninguno de ellos.
En la orilla del Arsenal, el nombre de moda es Cesc Fábregas. Anda mosqueado Wenger con el entorno del Real Madrid. A Wenger le han contado que el Madrid va directo a por Cesc. Lo único que ha ocurrido es que tras su lección de fútbol en el Bernabéu y su notable debut con la selección española ante Costa de Marfil en Valladolid, la prensa ha loado y acercado a Cesc Fábregas al Real Madrid. Cuanta Joseba Díaz, el agente de Fábregas, que en Zorrilla coincidió con Butragueño y Ramón Martínez en el palco. Y como anécdota dice que sólo cruzaron dos palabras para hablar del tiempo, de la gélida temperatura que había en Valladolid esa noche.
Ces se encuentra muy tranquilo. Llama la atención su madurez. Con 18 años ha heredado el papel de liderazgo de Vieira en el centro del campo y se enfrenta al Madrid en su mejor momento de forma. A su lado Gilberto Silva pone el fuelle de un equipo donde sí podría estar Bergkamp de inicio. El Arsenal vive con pasión la visita del Madrid. Podría haber llenado tres estadios. Highbury merece este encuentro. Inaugurado en 1913, el club de los 'gunners' abandonará esta temporada el viejo estadio y después de 93 años de vida, se trasladarán al Emirates Stadium, un recinto patrocinado, ultramoderno, situado a pocos metros del campo antiguo. El Arsenal tendrá un estadio del siglo XXI, con multitud de palcos privados que se venden como rosquillas en los últimos meses.
El Arsenal necesita una estrella el año que viene de reclamo para los miles de hinchas que se han acostumbrado a que Wenger se invente un buen puñado de futbolistas imberbes que pueden pintar la cara a los grandes expresos del fútbol europeo. Tras Cesc, ya consagrado, aparecen ahora el marfileño Eboué, que en la ida aburrió a Robinho, y el medio centro sub'21 francés Diaby, que últimamente aparecen en esa zona del campo. Junto a ellos, el bielorruso Hleb o el incansable Ljunberg mantienen vivo al Arsenal.
Alineaciones probables
Arsenal: Lehmann; Eboué, Senderos, Touré, Flamini; Hleb o Diaby, Ljungberg, Cesc, Gilberto Silva, Reyes; y Henry
Real Madrid: Casillas; Cicinho, Raúl Bravo, Sergio Ramos, Roberto Carlos; Gravesen, Beckham, Zidane, Guti; Baptista y Ronaldo o Cassano
Árbitro: Lubos Michel (Eslovaquia)
Estadio: Highbury. 20.45 horas (TVE 1)