El internacional alemán Sebastian Deisler, internado en un psiquiátrico

L D (EFE) Así lo ha confirmado el club alemán después de que varios diario de Múnich informaran sobre la situación del jugador. "Creo que no podrá volver a jugar hasta el año próximo", ha dicho el técnico del Bayern, Ottmar Hitzfeld, refiriéndose a la situación del jugador.

El director general del Bayern, Uli Hoennes, y el médico Florian Holsboer, que está tratando a Deisler, han explicado la enfermedad del centrocampista en una conferencia de prensa. "Se trata de una depresión típica. Es un cambio en el metabolismo nervioso para el que hay una tendencia en algunas personas", dice el médico. El facultativo se muestra optimista sobre las posibilidades de curación del jugador y niega cualquier paralelismo con el caso del checo Jan Simak, del Hannover 96, que padece el síndrome de burn out o agotamiento laboral.

Ya hace dos semanas, Deisler habló de sus problemas con Hoennes en una llamada telefónica. "No puedo más, estoy acabado", le dijo Deisler a Hoennes, después de lo cual el departamento médico del club estableció contacto con Holsboer. Deisler ha pasado por una racha de lesiones increíble, se perdió el Mundial de 2002 y fue baja casi toda la temporada pasada, pero parecía haberse recuperado y estaba dando buen rendimiento en el Bayern.

Hace doce días, Deisler jugó por última vez para el Bayern en el partido en que los bávaros derrotaron por 4-1 al Borussia Dortmund y antes de ese compromiso había sido elegido por los seguidores del equipo de Múnich como el "jugador del mes". Deisler fue convocado para el amistoso de Alemania contra Francia la semana pasada, pero no pudo ponerse a disposición del seleccionador germano, Rudi Voeller, debido a un endurecimiento muscular. Algunos problemas de salud de su novia, que espera un niño para febrero, han añadido más presión al jugador.