De esta forma, FLEC se atribuye la autoría del ametrallamiento que detuvo a la selección de Togo en su llegada a Cabinda, un enclave de Angola en territorio congoleño, según informa el portal francés 'www.rmc.fr' en su edición nocturna.
El documento que reivindica el atentado --que se saldó con la muerte del conductor del autobús y cuatro jugadores heridos-- aparece bajo la firma de "Rodrigues Mingas, secretario general de FLEC/PM", además de numerado (0041-SG-FLEC/PM JAN 10).
Por su parte, la nota enviada por FLEC explica que la Confederación africana de fútbol ya "había sido avisada" en "numerosas ocasiones porque sabía que este territorio estaba en guerra". "Tenía documentos explicando esto y no ha querido tener en cuenta las advertencias", indican. "No somos rebeldes sino un movimiento político y militar originario de Cabinda. No son rebeldes sino resistentes. Cabinda es un territorio ocupado ilegalmente y nosotros luchamos por la liberación de este territorio", apuntaron. Por último, el grupo separatista avisó de que "esto es sólo el principio de una serie de acciones que van a producirse sin descanso en el territorio de Cabinda".
El Gobierno angoleño dice que FLEC "no existe"
Por su parte, el gobierno de Angola ha asegurado que este atentado nada tenía que ver con FLEC. "Ha sido un acto de terrorismo que se está tratando en estos momentos. Puedo confirmar que hay lesiones, pero todavía no tenemos toda la información", ha manifestado a Reuters Bento Bembe, ministro sin cartera del país, que negó que el ataque contra la selección de Togo fuera cometido por los rebeldes de FLEC.
"FLEC no existe hace tiempo. El ataque proviene de ciertos individuos que quieren causarnos problemas", ha dicho. El ataque llega sólo dos días antes del comienzo de la Copa Africana de Naciones de 2010, un torneo continental que tendrá a buena parte de África pegada al televisor y la radio durante las próximas tres semanas.