L D (EFE) Sin embargo, esta asociación sigue con el propósito de garantizar la protección de los clubes, ante estos perjuicios, mediante la formulación de nuevas reglas. Además, Kurth negó que las quejas que la agrupación hizo llegar a la UEFA respondan a un interés por conseguir 860 millones de euros en compensación por las lesiones sufridas por varios jugadores durante la década pasada.
"La FIFA instó al G-14 a estimar la cuantía de los daños sufridos durante los diez años anteriores por todos los jugadores seleccionados y que sufrieron alguna lesión", explicó Kurt, quien añadió que este cálculo "sirve como aproximación para saber la importancia de los perjuicios que estos hechos suponen para los clubes".
A pesar del desmentido de Kurth, la UEFA, que respalda a la FIFA, afirmó que "los clubes, desde el principio, dejaron claro que buscaban una compensación por las bajas sufridas, dijeron que no se trataba sólo de una cuestión de dinero y ahora la compensación que han solicitado a la FIFA y a la UEFA es de 860 millones de euros", señaló el director ejecutivo de la UEFA, Lars Christer Olsson durante una reunión del comité en Budapest.
Teniendo en cuenta lo acaecido en el pasado, el G-14 aseguró que tratará de instaurar un sistema por el cual los clubes, cuyos jugadores sean convocados para disputar competiciones internacionales, reciban una compensación económica.
El ejemplo en el que el G-14 se apoyó desde un principio es el del equipo belga Sporting Charleroi, que reclama a la FIFA 615.000 euros después de que su estrella, el jugador marroquí Abdelmajid Oulmers, volviese lesionado de una competición internacional. Se trata de un caso que aún estudia un tribunal de Bélgica.
La UEFA dice que el G-14 no tiene ninguna legitimidad y rechaza la petición
El Comité Ejecutivo de la UEFA ha reiterado este miércoles que el G-14 no tiene "ninguna legitimidad" y rechaza las peticiones de este colectivo, que engloba a los 18 clubes europeos más grandes, al que acusa de "pretender sólo ganar dinero".
"Lo que quiere el G-14 es un apartheid, pero nosotros queremos la democracia", declaraba el portavoz de la UEFA, William Gaillard, cuyas palabras se han visto refrendadas por las del presidente, Lennart Johansson, y el miembro del Ejecutivo Michel Platini, quienes coinciden en que los clubes "sólo pretenden ganar dinero. La reacción de la UEFA, reunida en Budapest para congregar a su Comité Ejecutivo y que celebrará este jueves su XXX Congreso Ordinario, se produce dos días después de la reclamación del G-14 a la FIFA en la Justicia belga de una indemnización de 860 millones de euros por la cesión de jugadores a las selecciones nacionales durante los últimos diez años.
"El G-14 no tiene ninguna legitimidad. Los clubes tienen el derecho de hacer sus reivindicaciones, pero deben hacerlas a través de las estructuras existentes, el Foro de Clubes o las federaciones nacionales", señalaba Michel Platini, quien rechaza "esa filosofía" y aboga por dar más posibilidades a los equipos modestos en lugar de que "los ricos ganen más dinero". El francés, que se perfila como posible sustituto de Johansson al frente de UEFA, manifestó que los jugadores "deben acudir a las convocatorias de sus selecciones", aspecto importante para los clubes ya que "les da un valor añadido, que beneficia a sus equipos en caso de traspaso".
Además del rechazo a las pretensiones del G-14, el Ejecutivo ha decidido que los clubes participantes en la Liga de Campeones en el periodo 2006-2009 se repartirán el 75 por ciento de los ingresos obtenidos en esta competición y podrán llegar a percibir el 82 por ciento si la cifra final recaudada supera los 530 millones de euros.
La UEFA ha aprobado la distribución de los ingresos obtenidos en sus competiciones durante ese periodo y fijó inicialmente en el 25 por ciento la cantidad destinada a pagos solidarios y a la propia UEFA. Esta cifra podría bajar al 18 por ciento si se rebasan los 530 millones de ingresos. De la cantidad destinada a los clubes, un cinco por ciento se redistribuiría entre las ligas de los 32 equipos participantes en la fase de grupos de la Liga de Campeones.
El Ejecutivo ha acordado además que cualquier excedente de los 750 millones de euros estimados como beneficio se destinarán a un fondo de solidaridad con los clubes eliminados en la ronda de clasificación de la Liga de Campeones y los que participen en la ronda de clasificación y la primera fase de la Copa de la UEFA. Esta medida fue aprobada también para los clubes involucrados en la Copa Intertoto.
La distribución para la Copa de la UEFA entregará el 75% de la recaudación a los 40 clubes que participen en la fase de grupos y el 25% será para la propia UEFA, en concepto de costes administrativos y de organización. El 60% de la partida de los clubes se repartirá entre los 40 equipos que participen en la fase de grupos y el 40% será para los ocho que lleguen a cuartos de final, ya que en esta fase entran en juego los derechos de mercado (televisión, patrocinadores y proveedores).