L D (EFE) El Estudiantes se jugaba algo más que la clasificación para cuartos, pues con su triunfo y el del Limasol chipriota ante el Lieja Basket, pasa como líder del grupo I. El debut de Mariano de Pablos, un hombre vinculado a la historia del Ramiro, era otro aliciente más para el choque, que al final resolvió a su favor. Esta victoria sirve además para endulzar el sufrimiento de la parroquia estudiantil, ya que en la Liga ACB no están obteniendo tan buenos resultados como era de esperar.
El Estudiantes se aferró a la solidez defensiva como baza para poder superar al conjunto lituano. Pero ambos conjuntos debieron trazar la misma estrategia, ya que durante los primeros cinco minutos de juego los marcadores permanecieron inmóviles. El recién recuperado McDonald tomó la iniciativa en las labores ofensivas y se mostró imparable, marcando diez tantos durante la primera mitad. Por su parte, Carlos Suárez y 'Pancho' Jasen hicieron bien sus deberes y evitaron las embestidas de Vaciunas y de Mazutis, los hombres más activos del Siaulia, por lo que el Estudiantes tomó ventaja en el marcador.
Los lituanos tardaron siete minutos en anotar su primera canasta, pero su ineficacia anotadora vería una tregua en los primeros instantes de la segunda mitad. Vaciunas resultó clave para que su equipo acortara distancias en el marcador, que dejó al equipo madrileño con una ventaja mínima de (32-29, m.15). Sin embargo, McDonald volvió a demostrar su presencia en la pista y en tres minutos lograron mejorar su racha anotadora dejando al Siauliai a dieciséis puntos de distancia (45-29, m.18). Una ventaja que continuaría aumentando tras el descanso, cuando los de Mariano de Pablos llegaron a mantener durante dos minutos una renta de veinte tantos sobre su rival (64-44, m.29).
La concentración en defensa, la lucha por hacerse con el rebote y la frecuente presencia de jugadores en la línea de tiros libres restó frescura ofensiva a un encuentro que dominó el equipo madrileño de principio a fin merced a las buenas maneras en defensa y a la rapidez estratégica en los contraataques. Un triunfo que supone una inyección de moral para el encuentro de Liga ACB que disputará el próximo domingo frente al Caja San Fernando y en el que se verá si la confianza de un hombre de la casa, como Mariano de Pablos, es suficiente para emprender el ascenso en la tabla.