L D (EFE) Marlon Garnett podía presumir de semejante acierto con el marcador en 58-54. El Estudiantes pegó un tirón muy oportuno a la sombra del norteamericano. Además, Carlos Suárez, cada día más entonado después de los problemas físicos que sufrió a principio de temporada, también estuvo fino desde el arco de 6,25. Los españoles, sin disfrutar de un segundo de tranquilidad pero también sin momentos de gran apuro, sortearon la tempranera tercera falta personal de Gonzalo Martínez, en el segundo cuarto, con cierta soltura.
Pedro Martínez, técnico colegial, arriesgó al colocar al base en el quinteto que inició el tercer cuarto. La jugada le salió bien. El Estudiantes mantuvo el equilibrio y la serenidad que aporta el base madrileño para encauzar el choque en los minutos que mayores peligros presagiaban. La formación estudiantil abrió el hueco a nueve puntos (68-59) y, aplicado en una defensa mejor que en ocasiones anteriores y agarrado a la confianza de contar con un amplio margen de maniobra, ya que podía perder por un máximo de siete puntos y pasar de ronda, resolvió el partido y volvió a la senda de la victoria.
Después de tres derrotas consecutivas, ante el Akasvayu Girona y el Pamesa Valencia en la ACB y el Dijon francés en Europa, el cuadro colegial ha vuelto a saborear un triunfo, dejó ordenado el frente continental y, a partir del próximo fin de semana, podrá pelear dentro de la ACB por un puesto en la Copa del Rey.
Pedro Martínez, técnico colegial, arriesgó al colocar al base en el quinteto que inició el tercer cuarto. La jugada le salió bien. El Estudiantes mantuvo el equilibrio y la serenidad que aporta el base madrileño para encauzar el choque en los minutos que mayores peligros presagiaban. La formación estudiantil abrió el hueco a nueve puntos (68-59) y, aplicado en una defensa mejor que en ocasiones anteriores y agarrado a la confianza de contar con un amplio margen de maniobra, ya que podía perder por un máximo de siete puntos y pasar de ronda, resolvió el partido y volvió a la senda de la victoria.
Después de tres derrotas consecutivas, ante el Akasvayu Girona y el Pamesa Valencia en la ACB y el Dijon francés en Europa, el cuadro colegial ha vuelto a saborear un triunfo, dejó ordenado el frente continental y, a partir del próximo fin de semana, podrá pelear dentro de la ACB por un puesto en la Copa del Rey.