El Espanyol logra una balsámica victoria a costa de un triste Mallorca

L D (EFE) El triunfo se cimentó gracias a un penalti transformado por Raúl Tamudo, que consiguió su primer tanto en el campeonato, y a un gol de Luis García, a pase de De la Peña. Después de tanto tiempo sin ganar, instalado en la zona de descenso, el equipo de Lotina dio lo mejor de sí mismo para llevarse una trabajada victoria a costa del Mallorca. No había tanta tensión como el día del Athletic, cuando el técnico se jugaba literalmente el cuello, y, además, los resultados que se habían sucedido a lo largo de la jornada eran favorables a los locales. Sólo hacía falta una victoria del Espanyol y así fue.

El peso del partido lo llevaron los blanquiazules ante un Mallorca muy trabajador, pero que apenas tuvo opciones. Los de Cúper habían sumado siete puntos en los tres últimos partidos, pero no tuvieron profundidad en su fútbol. En cuanto apareció Iván de la Peña e hizo participar en el juego a los extremos Riera y Juanfran, el cuadro blanquiazul empezó a carburar. Además, Luis García estuvo muy participativo y Tamudo, como siempre luchador ante la contundencia de la pareja defensiva italiana de los mallorquinistas. A pesar de esa puesta en escena, al Espanyol le faltaba confianza en sus posibilidades. Hasta la fecha había perdido tres de los últimos cinco partidos jugados en casa y eso les pesó bastante.

La primera ocasión de peligro llegó tras un lanzamiento de falta de De la Peña que Tamudo no llegó por poco (m.14), como tampoco llegó el delantero tras una jugada de Luis García por la izquierda (m.26). El Mallorca sólo llegaba por medio de los disparos lejanos de Borja, quien puso a prueba a Kameni en el minuto 29. En el cuarto de hora final del primer tiempo es cuando más apretó el Espanyol. El primer tanto llegó tras un penalti transformado por Tamudo en el minuto 40 y dos minutos después, el Espanyol dejó sentenciado el partido. Fue una jugada a la contra dirigida por de la Peña. Tamudo atrajo a la defensa y Luis García recibió el balón libre de marca para batir a Prats (2-0).

Ese resultado fue balsámico para los de Lotina, quienes salieron con mayor confianza tras el descanso. Además, el Mallorca tampoco parecía muy decidido a lanzarse al ataque y el Espanyol apenas pasó apuros y buscó aumentar la ventaja con jugadas a la contra. Cúper movió ficha y sustituyó a un defensa (Iuliano) por un delantero (Okubo), pero su equipo continuaba sin reaccionar. Los locales, mejor situados, esperaron su momento: una nueva conexión de la Peña con Tamudo o con Luis García, pero no hubo más. A un cuarto de hora para el final, el técnico argentino puso toda su artillería en juego, con Campano y Yordi, pero ninguno de los dos fue revulsivo alguno para su equipo. El Espanyol, necesitado de la victoria, no se apuró y se aseguró la victoria sin problemas, un triunfo que le aleja de la zona peligrosa.