El Espanyol culmina una jornada redonda al vencer a un Betis que jugó mejor con diez que con once

L D (EFE) Impulsados por los más de 40.000 espectadores que se dieron cita en Montjuic, el Espanyol, que fue homenajeado por su rival con un pasillo de honor, fue a por el partido desde el primer momento. Después de seis partidos sin ganar en Liga, los periquitos no podían dejar escapar la posibilidad de atrapar al Betis en la clasificación y así fue. Ya en el minuto 2, Tamudo dejó pasar con inteligencia un pase en profundidad y Luis García se encontró solo ante un Contreras que, en una gran intervención, evitó el tanto. Después de los primeros minutos en los que los locales apretaron mucho, el Betis se rehizo. Su centro del campo equilibró más el juego en un partido con muchas iniciativas, con intensidad y ritmo, aunque sin muchas llegadas ante la portería contraria.

 

La presión en el centro del campo y la participación en el juego de Iván de la Peña permitieron a los blanquiazules llevar las riendas del partido. Precisamente, en una falta lanzada por el cántabro se produjo un rechace de la defensa, centró Sergio Sánchez y Fredson asistió de cabeza a Jarque, quien batió a Contreras con un remate cercano en el minuto 23. Despabilaron los de Serra Ferrer, aunque no tenían llegada. Muy desasistido Robert, Rivera, el catalizador del juego bético, apenas intervino y los sevillanos no remataron ni una sola vez entre los tres palos de la meta de Gorka Iraizoz. Al borde del descanso, Tamudo tuvo la ocasión de darle a su equipo una ventaja importante, pero falló un penalti cometido por David Rivas a Fredson. El capitán erró su tercer penalti sobre cuatro intentos y desperdició una inmejorable ocasión para darle más tranquilidad a su equipo.

El entrenador bético decidió cambiar el orden de las cosas con la entrada de Capi por Melli, retrasó a Varela y cambió de posición a Edu. Después puso a Assunçao por Arzu, pero Serra Ferrer no tuvo oportunidad de ver si las variaciones tácticas surtirían efecto, porque en el minuto 56, una jugada de pillería de Tamudo finiquitó el partido. El meta bético Contreras controló un balón sin peligro, pero se le escapó ante el capitán españolista. El delantero le arrebató la pelota y fue derribado por el portero cuando se disponía a marcar. Contreras fue expulsado, entró Doblas por Edu, y Tamudo volvió a errar el lanzamiento de penalti, aunque esta vez estuvo atento en el rechace y marcó el 2-0.

Curiosamente, jugando con diez, el Betis despertó. Assunçao, en el 62, lanzó el primer remate entre los tres palos de la meta local. El brasileño lo probó poco después (m.64) y también Capi (m.66), en unos minutos en los que los béticos decidieron jugárselo todo a una carta. Un lanzamiento directo de falta de Assunçao que dio en el palo (m.76) fue un nuevo aviso. Iraizoz, en el 79, evitó el tanto de Rivas y Juanito, sólo un minuto después, también tuvo cerca el gol. Fueron en unos minutos en los que las ocasiones eran del Betis y el Espanyol llegaba con jugadas a la contra, como en un remate de De la Peña que dio en el palo (m.82) o en un nuevo remate al travesaño de Assunçao, ya en el tiempo añadido.