L D (EFE) El consejero delegado del Espanyol, José Luis Morlanes, da casi por hecho que la sanción a Márquez del CSD también le imposibilitará dirigir al equipo en competición europea, aunque el club está a la espera de una notificación oficial. En caso de confirmarse este extremo, algún integrante del cuerpo técnico deberá realizar las funciones de primer entrenador ante el Maccabi Petach-Tikva de este jueves.
El preparador físico, Eduardo Domínguez, es el principal candidato para ejercer de técnico, aunque otros ayudantes de Lotina como Ramón Catalá, preparador físico, también tienen el carné de nivel 3, imprescindible para entrenar y dirigir en todas las categorías. Domínguez, quien confía en que Márquez pueda sentarse en el banquillo ante el Maccabi Petach, ha explicado que todavía no habían pensado cómo se organizarán. "Conozco bien al equipo y cómo funciona. En caso de que me tocara ser el máximo responsable, no creo que haya muchos problemas porque los tres estaríamos en contacto permanente", dice. "Sería muy mala suerte que ninguno de los dos se pudiera sentar", añade.
El ayudante de Lotina, que no tiene ninguna experiencia profesional como entrenador, aunque sí ha dirigido algún equipo de fútbol base, recuerda que el equipo iba a preparar el encuentro del jueves como en otras ocasiones. "Sólo puede ser que cambie la persona encargada de transmitir las correcciones a los jugadores", apunta Domínguez. Ante el Betis (0-0), Márquez en varias fases del encuentro ya se comunicó con el preparador físico para darle alguna indicación.
Como ha recordado el consejero delegado, el club tomará las medidas pertinentes para que la comunicación entre los técnicos sea fluida. "Organizaremos el mejor sistema posible", apunta Morlanes. El gallego dice que entrenadores como Rafa Benítez (Liverpool) sitúan a algún ayudante en la grada durante los partidos. "Se tiene otra perspectiva, a veces, incluso es mejor que la nuestra. Luego, en la media parte comentan y toman las decisiones pertinentes", manifiesta.
La situación que vivirá el Espanyol el jueves es bastante anómala en el fútbol nacional. Sólo los casos provocados por el actual presidente del Alavés, Dimitri Piterman, son semejantes. Piterman se acreditó como fotógrafo en un partido Osasuna-Racing de Santander para dar las órdenes a sus jugadores cuando el entrenador oficial era Chuchi Cos, hombre de su confianza. El magnate estadounidense de origen ucraniano se sienta ahora en el banquillo del Alavés como utillero del equipo. El Espanyol no necesita llegar a estos extremos porque tiene la solución en casa. La duda es saber quién hará las veces de primer entrenador en el importante partido ante el Maccabi Petach.
El preparador físico, Eduardo Domínguez, es el principal candidato para ejercer de técnico, aunque otros ayudantes de Lotina como Ramón Catalá, preparador físico, también tienen el carné de nivel 3, imprescindible para entrenar y dirigir en todas las categorías. Domínguez, quien confía en que Márquez pueda sentarse en el banquillo ante el Maccabi Petach, ha explicado que todavía no habían pensado cómo se organizarán. "Conozco bien al equipo y cómo funciona. En caso de que me tocara ser el máximo responsable, no creo que haya muchos problemas porque los tres estaríamos en contacto permanente", dice. "Sería muy mala suerte que ninguno de los dos se pudiera sentar", añade.
El ayudante de Lotina, que no tiene ninguna experiencia profesional como entrenador, aunque sí ha dirigido algún equipo de fútbol base, recuerda que el equipo iba a preparar el encuentro del jueves como en otras ocasiones. "Sólo puede ser que cambie la persona encargada de transmitir las correcciones a los jugadores", apunta Domínguez. Ante el Betis (0-0), Márquez en varias fases del encuentro ya se comunicó con el preparador físico para darle alguna indicación.
Como ha recordado el consejero delegado, el club tomará las medidas pertinentes para que la comunicación entre los técnicos sea fluida. "Organizaremos el mejor sistema posible", apunta Morlanes. El gallego dice que entrenadores como Rafa Benítez (Liverpool) sitúan a algún ayudante en la grada durante los partidos. "Se tiene otra perspectiva, a veces, incluso es mejor que la nuestra. Luego, en la media parte comentan y toman las decisiones pertinentes", manifiesta.
La situación que vivirá el Espanyol el jueves es bastante anómala en el fútbol nacional. Sólo los casos provocados por el actual presidente del Alavés, Dimitri Piterman, son semejantes. Piterman se acreditó como fotógrafo en un partido Osasuna-Racing de Santander para dar las órdenes a sus jugadores cuando el entrenador oficial era Chuchi Cos, hombre de su confianza. El magnate estadounidense de origen ucraniano se sienta ahora en el banquillo del Alavés como utillero del equipo. El Espanyol no necesita llegar a estos extremos porque tiene la solución en casa. La duda es saber quién hará las veces de primer entrenador en el importante partido ante el Maccabi Petach.