(Libertad Digital) El empate sin goles de la ida en el Estadio del Dragón concede al Dépor cierta ventaja, teniendo en cuenta la influencia que podría tener en el choque el factor campo, circunstancia a la que apelan tanto el presidente como el entrenador y los jugadores, los cuales reclaman el máximo apoyo de los aficionados desde las gradas.
Se trata de alcanzar la victoria en el tiempo reglamentado de 90 minutos o sacrificar los corazones de la afición deportivista y jugarse en los penaltis el pase a la final de Champions, siempre y cuando el partido no se decante en favor de los portugueses. Riazor presentará un nuevo lleno total, con alrededor de 36.000 espectadores, con apenas 2.000 seguidores del equipo luso. La masiva parroquia blanquiazul, como estos días reflejaba la prensa lusa, convertirá el coliseo coruñés en un auténtico infierno ambiental para los jugadores de José Mourinho. Más que nunca el jugador número doce tendrá un papel determinante.
La victoria ante el Real Madrid ha reforzado la moral de los jugadores de Javier Irureta, quien pide el máximo esfuerzo para convertir en realidad el sueño del deportivismo de dar la campanada definitiva en el fútbol continental y ganar por vez primera la Copa de Europa, después de haber conquistado todos los títulos españoles en la última década. El equipo coruñés ya ha superado esta temporada sus anteriores registrados en la máxima competición continental. Nunca antes había pasado de cuartos y en esta campaña alcanzó la semifinal después de dejar en la cuneta al campeón (Milán) y subcampeón (Juventus) de la edición anterior. Además, ya tiene asegurada su participación, por quinto año consecutivo, en la Liga de Campeones.
Se trata de alcanzar la victoria en el tiempo reglamentado de 90 minutos o sacrificar los corazones de la afición deportivista y jugarse en los penaltis el pase a la final de Champions, siempre y cuando el partido no se decante en favor de los portugueses. Riazor presentará un nuevo lleno total, con alrededor de 36.000 espectadores, con apenas 2.000 seguidores del equipo luso. La masiva parroquia blanquiazul, como estos días reflejaba la prensa lusa, convertirá el coliseo coruñés en un auténtico infierno ambiental para los jugadores de José Mourinho. Más que nunca el jugador número doce tendrá un papel determinante.
La victoria ante el Real Madrid ha reforzado la moral de los jugadores de Javier Irureta, quien pide el máximo esfuerzo para convertir en realidad el sueño del deportivismo de dar la campanada definitiva en el fútbol continental y ganar por vez primera la Copa de Europa, después de haber conquistado todos los títulos españoles en la última década. El equipo coruñés ya ha superado esta temporada sus anteriores registrados en la máxima competición continental. Nunca antes había pasado de cuartos y en esta campaña alcanzó la semifinal después de dejar en la cuneta al campeón (Milán) y subcampeón (Juventus) de la edición anterior. Además, ya tiene asegurada su participación, por quinto año consecutivo, en la Liga de Campeones.
Irureta duda entre Fran y Luque...
El Dépor se mantiene invicto en Riazor desde el 0-4 que encajara ante el Milán en septiembre de 2002. Desde entonces lleva ocho victorias consecutivas y sin encajar ni un gol (Rosenborg 1-0, Basilea 1-0, Manchester 2-0, PSV 2-0, Mónaco 1-0, AEK 3-0, Juventus 1-0 y Milán 4-0). Para lograr la gesta de estar en Arena AufSchalque de Gelsenkirghen, Irureta no podrá echar mano de su once de gala debido a las sanciones que la UEFA impuso a dos de sus pilares fundamentales: el centrocampista brasileño Mauro Silva y el central portugués Jorge Andrade. El luso, que disputó todos los partidos ligueros -salvo uno por acumulación de tarjetas- y de Champions, se pierde el encuentro por la amistosa patada que dio a su íntimo amigo Deco en el partido de ida. Su ausencia será suplida por el futbolista asturiano César, mientras que Mauro Silva -sin duda el hombre decisivo en el juego de medio campo de los blanquiazules- será reemplazado por el argentino Aldo Pedro Duscher, que acompañará a Sergio González en el doble pivote.
En el único entrenamiento previo que la plantilla ha realizado en la mañana de este lunes en la ciudad deportiva de Abegondo, el técnico vasco repartía trece petos entre los que se cree optan a la titularidad, por lo que hay dos dudas en la previsible alineación. Una es en la línea defensiva, en la que César o Pablo Amo acompañarán a Nourredine Naybet en el eje central, con más posibilidades para el primero. Y la otra está en la banda izquierda, entre el capitán Francisco González Fran, y Albert Luque. En este último caso la alineación de uno u otro dependerá de si Irureta se decanta por tener más la posesión del balón y fomentar más el repliegue defensivo, en cuyo caso pondría a Fran, o si quiere darle mayor profundidad al juego y entonces utilizaría de principio a Luque.
... y Mourinho entre Carlos Alberto y Derlei
El Oporto llega a Riazor como campeón de la Liga portuguesa, pero tras sufrir una derrota este fin de semana frente al Río Ave (1-0), y con el objetivo de llegar a la final de la Liga de Campeones y lograr así su segundo título de la temporada. Aunque Mourinho no quiere hablar sobre el equipo que jugará en Riazor, no es difícil adivinar las dudas que el entrenador puede tener a estas alturas, sobre todo porque no convocó a ningún extremo. El sistema táctico no variará mucho del 4-4-2, aunque en posesión del balón, el equipo podría jugar en 4-3-3, ya que Deco podría unirse a los dos delanteros.
Las principales dudas son sobre quién jugará de inicio en el medio del campo, Pedro Mendes o Alenitchev, y si en la delantera estará Carlos Alberto o Derlei, al lado de Beni McCarthy. En los últimos partidos de Liga de Campeones, Mourinho parecía tener un equipo fetiche, pero el empate casero con el Deportivo y la necesidad de ganar o empatar con goles, puede obligar al técnico del Oporto a alterarlo. La defensa no debería sufrir cambios y jugarán los habituales, Paulo Ferreira, Jorge Costa, Ricardo Carvalho y Nuno Valente. En el centro del campo, Costinha, Maniche y Deco no ven peligrar su condición de titulares, pero las dudas surgen entre Alenitchev o Pedro Mendes.
El portugués está en condiciones de disputar la titularidad al ruso, ya que defiende mejor, aunque Alenitchev hace una mejor lectura del juego en términos ofensivos. En la delantera el ex céltico McCarthy es seguro, pero para acompañarlo Mourinho tiene dos opciones, el habitual Carlos Alberto, en buena forma física, o el brasileño Derlei, que aunque acaba de salir de una lesión que le ha tenido parado más de tres meses es el quinto máximo goleador de la liga lusa, y podría ser el factor sorpresa para romper la defensa gallega. El brasileño tiene a su favor, además, que Mourinho no convocó a los extremos César Peixoto y Marco Ferreira, por lo que es el único jugador que podría actuar en esa posición, aunque en un principio su posición estaría junto a McCarthy. Derlei ya ha disputado seis partidos en Liga de Campeones y marcó dos goles, el último, días antes de lesionarse, supuso el empate en el Bernabéu ante el Real Madrid, aunque el paso a octavos de final ya estaba asegurado.
Alineaciones probables
Deportivo: Molina; Manuel Pablo, César o Pablo Amo, Naybet, Romero; Duscher, Sergio, Víctor, Valerón, Luque o Fran; y Pandiani
Oporto: Vítor Baía; Paulo Ferreira, Jorge Costa, Ricardo Carvalho, Nuno Valente; Alenitchev o Pedro Mendes, Costinha, Maniche, Deco; McCarthy y Derlei o Carlos Alberto
Árbitro: Pierluigi Collina (Italia)
Estadio: Riazor. 20,45 horas (Canal +)
Las principales dudas son sobre quién jugará de inicio en el medio del campo, Pedro Mendes o Alenitchev, y si en la delantera estará Carlos Alberto o Derlei, al lado de Beni McCarthy. En los últimos partidos de Liga de Campeones, Mourinho parecía tener un equipo fetiche, pero el empate casero con el Deportivo y la necesidad de ganar o empatar con goles, puede obligar al técnico del Oporto a alterarlo. La defensa no debería sufrir cambios y jugarán los habituales, Paulo Ferreira, Jorge Costa, Ricardo Carvalho y Nuno Valente. En el centro del campo, Costinha, Maniche y Deco no ven peligrar su condición de titulares, pero las dudas surgen entre Alenitchev o Pedro Mendes.
El portugués está en condiciones de disputar la titularidad al ruso, ya que defiende mejor, aunque Alenitchev hace una mejor lectura del juego en términos ofensivos. En la delantera el ex céltico McCarthy es seguro, pero para acompañarlo Mourinho tiene dos opciones, el habitual Carlos Alberto, en buena forma física, o el brasileño Derlei, que aunque acaba de salir de una lesión que le ha tenido parado más de tres meses es el quinto máximo goleador de la liga lusa, y podría ser el factor sorpresa para romper la defensa gallega. El brasileño tiene a su favor, además, que Mourinho no convocó a los extremos César Peixoto y Marco Ferreira, por lo que es el único jugador que podría actuar en esa posición, aunque en un principio su posición estaría junto a McCarthy. Derlei ya ha disputado seis partidos en Liga de Campeones y marcó dos goles, el último, días antes de lesionarse, supuso el empate en el Bernabéu ante el Real Madrid, aunque el paso a octavos de final ya estaba asegurado.
Alineaciones probables
Deportivo: Molina; Manuel Pablo, César o Pablo Amo, Naybet, Romero; Duscher, Sergio, Víctor, Valerón, Luque o Fran; y Pandiani
Oporto: Vítor Baía; Paulo Ferreira, Jorge Costa, Ricardo Carvalho, Nuno Valente; Alenitchev o Pedro Mendes, Costinha, Maniche, Deco; McCarthy y Derlei o Carlos Alberto
Árbitro: Pierluigi Collina (Italia)
Estadio: Riazor. 20,45 horas (Canal +)