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El COE admite que "a lo mejor la letra del Himno no era lo que la gente esperaba"

En una entrevista concedida al diario Marca dos días después de la filtración a ABC de la letra elegida para aspirar a ser la oficial del Himno de España, Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español, afirma que no conocía la composición, a pesar de que su organismo y la SGAE eran los encargado de seleccionar una entre 7.000 propuestas. Ante la fría acogida entre los españoles y el rechazo generalizado de la prensa, Blanco da marcha atrás y tranquiliza a los más críticos al afirmar que "no tiene por qué ser la definitiva".

(Libertad Digital) Alejandro Blanco afirma en la entrevista que se siente "satisfecho por algunas reacciones de deportistas y de gente de la sociedad que ha aplaudido la iniciativa", aunque cree que quizás "no es la letra que la gente esperaba, quizás esperaban otra cosa". El presidente del COE defiende que "no ha habido rechazo", a pesar de los descalificativos que la prensa nacional le dedicó a la letra elegida este sábado.
 
La revelación más sorprendente de la entrevista es que Alejandro Blanco no conocía la letra. Preguntado por si la había analizado, el presidente del COE afirma que "no he tenido mucho tiempo, la verdad, porque yo la desconocía". El organismo olímpico nacional y la SGAE fueron las promotoras de la iniciativa, las encargadas de recopilar las composiciones que enviaban los aspirantes y, posteriormente, cribar las que consideraban más adecuadas. "Éste no tiene por qué ser el himno definitivo", dice para calmar los ánimos de todos los que criticaron o no les gusta la candidata a ser aprobada por el Congreso de los Diputados.
 
Sigue defendiendo la ahora polémica iniciativa porque "se palpaba en la sociedad la necesidad para que nuestros deportistas la canten en el podio", reduciendo así la modificación del Himno al ámbito deportivo. Pero la revelación deABC
ha trascendido a toda la sociedad: "No me podía imaginar la repercusión que ha tenido", afirma. Sin embargo, no sostiene que se haya politizado la iniciativa, aunque sabe y comenta que su misión ha terminado y que ahora "nuestros políticos tendrán que decidir a tenor de la respuesta que hayan visto en la sociedad". Además, no cree que sea un fracaso si el Congreso no aprueba la letra elegida: "En ningún caso podemos sentir una decepción".

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