Este próximo verano, como el anterior, el culebrón de Cesc Fàbregas amenaza con eclipsar el mercado de fichajes. El capitán del Arsenal ya quiso abandonar la entidad de Londres después de la disputa del Mundial de Sudáfrica y, de nuevo, los clubes europeos se rifarán sus servicios a partir del próximo junio.
La guerra parece encarnizada entre Chelsea y Barcelona, aunque el Real Madrid también podría estar interesado en contar con el catalán como acompañante de Xabi Alonso. La primera opción de Cesc, como de todos es conocido, es el equipo azulgrana, pero los directivos del Barcelona comienzan ya a resignarse ante los petrodólares de Roman Abramovich.
El vicepresidente económico del Barcelona, Xavier Faux, ha indicado en RAC1 que la entidad tiene 45 millones de euros para gastar en fichajes esta temporada, dinero insuficiente para hacerse con Cesc Fàbregas. "No podemos pagar lo que se dice", comenta el directivo. Y es que el Chelsea está preparando 60 millones de euros, al igual que con Fernando Torres, para reforzar el centro del campo del equipo blue.
El Bayern va a por Keita
Para conseguir meter más dinero en la caja, el Barcelona podría colocar a algún jugador de su plantilla. Uno de los que más cartel internacional tienen y que el club no vería con malos ojos un traspaso sería Seydou Keita.
El jugador cuenta con pocos minutos en el once de Guardiola, si bien éste le lanza piropos en las ruedas de prensa. El Bayern de Múnich ya se ha fijado en el maliense y podría desembolsar una cantidad que rondaría los 12 millones de euros.