L D (EFE) Esta campaña los de Joan Plaza sólo han podido doblegar a los azulgranas en uno de los cuatro partidos en los que se han enfrentado: el correspondiente al 'Top-16' de la Euroliga disputado en Vistalegre, y después de ir todo el encuentro por detrás en el marcador. Un Barça crecido después de eliminar al TAU en la máxima competición continental y asegurarse su presencia en la Final-Four de Berlín, vuelve a centrarse en la ACB, donde su principal objetivo es consolidar la segunda plaza de la fase regular en las cuatro jornadas que restan.
Con un balance de 20 victorias y 5 derrotas, dos más que el conjunto vitoriano y dos menos que el eterno rival, los hombres de Xavi Pascual tienen casi imposible arrebatar el liderato a los baskonistas, pero una victoria ante el Real Madrid le aseguraría prácticamente la ventaja de campo hasta una hipotética final. Para lograrlo, el Regal Barcelona volverá a echar mano de su gran estrella, el escolta Juan Carlos Navarro, que regresa al equipo después de descansar en Granada para recuperarse de una contractura en el bíceps femoral de la pierna izquierda que arrastraba desde la serie de cuartos de Euroliga ante el TAU. Navarro, un jugador que se motiva especialmente contra el Real Madrid, ha sido el máximo anotador de su equipo en los duelos que ha librado esta temporada ante los blancos, con un media de 20,2 puntos por encuentro.
El acierto del de Sant Feliu de Llobregat y la intensidad defensiva del mejor equipo de la Liga en este apartado (71 puntos encajados por encuentro), serán claves para doblegar en Vistalegre al Madrid, que cuenta con el segundo mejor ataque de la competición (85,4 anotados por partido) y con el poder anotador de Louis Bullock y Felipe Reyes (15,5 y 14,5 de media ante los azulgranas esta temporada, respectivamente).
Pero este Barça-Madrid no será sólo un duelo Navarro-Bullock desde el perímetro, ya que habrá que estar atentos a la guerra bajo los tableros entre los dos conjuntos que mejores estadísticas presentan en este apartado. Impedir que los blancos tengan segundos ataques gracias a su dominio del rebote ofensivo -con especial atención a la tiranía que Reyes ejerce en esta faceta del juego- y controlar el rebote defensivo para poder salir al contraataque, será la principal misión de Santiago, Andersen, Vázquez y compañía.