L D (EFE) El Barcelona ha repetido la alineación que desplegó en su semifinal del pasado jueves y que tan buen resultado le dio ante América de México (4-0). Rijkaard volvió a elegir a Motta, en vez de Edmilson, para reforzar el centro del campo. Por su parte, Abel Braga tampoco movió sus fichas y puso en la cancha el once inicial de la victoria frente al Al Ahly egipcio (2-1). Sin sorpresas en las alineaciones, el partido comenzó muy equilibrado. Los dos equipos se repartieron el control del balón, y a una jugada de peligro del campeón de Europa le sucedía otra del coloso sudamericano.
En el primer cuarto de hora de juego el Barça convirtió la banda derecha en una autopista para Zambrotta y Giuly, pero sus continuos centros no llegaron a conectar con Ronaldinho y Gudhonsen, bien vigilados por la ordenada zaga brasileña. El Internacional, por su parte, trató de buscar con balones largos a su joven delantero, Alexandro "Pato", pero éste tenía en frente a un muro llamado Carles Puyol. La primera ocasión clara para el Barcelona llegó en el minuto 18 al repeler el portero del conjunto "colorado" sendos disparos seguidos de Giovanni van Bronckhorst y Ronaldinho. Poco después, se reclamaron dos penaltis en el área del Porto Alegre, tras una entrada por detrás de Ceara a Gudjohnsen y después de que Ronaldinho, que comenzó entonces a hacer diabluras, fuera derribado por Indio.
En este punto, el partido se estiró y comenzaron a llegarle balones claros a Gudhonhsen, pero el islandés no tuvo su día. Ronaldinho también parecía tener el punto de mira desviado. El "gaucho", que se enfrentaba a uno de los equipos de su ciudad natal, dispuso de un lanzamiento de falta al borde del área de los que no suele fallar. A falta de diez minutos para el descanso Ronaldinho hizo que el estadio cantara gol con un disparo lejano y raso que, sin embargo, se marchó fuera pegado a la cepa del poste. Por su parte, el internacional se fue al vestuario después de avisar de que seguía ahí con un tiro alto de Indio.
El segundo tiempo comenzó con la entrada de Belletti por Zambrotta, en el equipo catalán, y Vargas por Alex, por parte brasileña. El encuentro entró entonces en una fase de juego espeso, sin ideas, sin desbordes. El árbitro dio la sensación de colocarse en el lado sudamericano al hacer de nuevo la vista gorda, esta vez en un claro derribo a Gudjonhsen al borde del área.
Transcurridos quince minutos, Rijkaard decidió afinar la línea de creación de su orquesta e introdujo a Xavi por Motta. El técnico del Internacional juzgó entonces que necesitaba renovar la pólvora de sus delanteros y cambió a Alexandro "Pato" de 17 años, por otra joven promesa, Luiz Adriano, de 19. Cuando parecía que el encuentro se volcaba del lado azulgrana, el Porto Alegre, hasta entonces desaparecido, armó un contraataque que resultó letal. Corría el minuto 82, Rubens Cardoso aguantó el balón y logró superar a Puyol, el último hombre del Barcelona. A su lado vio a Adriano que entraba como un rayo y éste recogió el balón dentro del área y lo cruzó sin que Valdés nada pudiera hacer.
El centrocampista, sustituto de Fernandao, destrozó los sueños del Barcelona, en su segundo asalto al título mundial. Poco después, Ronaldinho pudo haberse erigido en salvador del Barça al ejecutar una falta pegada a la frontal del área, pero este no fue el día de la estrella brasileña, y su disparo se marchó fuera rozando el palo.
En el primer cuarto de hora de juego el Barça convirtió la banda derecha en una autopista para Zambrotta y Giuly, pero sus continuos centros no llegaron a conectar con Ronaldinho y Gudhonsen, bien vigilados por la ordenada zaga brasileña. El Internacional, por su parte, trató de buscar con balones largos a su joven delantero, Alexandro "Pato", pero éste tenía en frente a un muro llamado Carles Puyol. La primera ocasión clara para el Barcelona llegó en el minuto 18 al repeler el portero del conjunto "colorado" sendos disparos seguidos de Giovanni van Bronckhorst y Ronaldinho. Poco después, se reclamaron dos penaltis en el área del Porto Alegre, tras una entrada por detrás de Ceara a Gudjohnsen y después de que Ronaldinho, que comenzó entonces a hacer diabluras, fuera derribado por Indio.
En este punto, el partido se estiró y comenzaron a llegarle balones claros a Gudhonhsen, pero el islandés no tuvo su día. Ronaldinho también parecía tener el punto de mira desviado. El "gaucho", que se enfrentaba a uno de los equipos de su ciudad natal, dispuso de un lanzamiento de falta al borde del área de los que no suele fallar. A falta de diez minutos para el descanso Ronaldinho hizo que el estadio cantara gol con un disparo lejano y raso que, sin embargo, se marchó fuera pegado a la cepa del poste. Por su parte, el internacional se fue al vestuario después de avisar de que seguía ahí con un tiro alto de Indio.
El segundo tiempo comenzó con la entrada de Belletti por Zambrotta, en el equipo catalán, y Vargas por Alex, por parte brasileña. El encuentro entró entonces en una fase de juego espeso, sin ideas, sin desbordes. El árbitro dio la sensación de colocarse en el lado sudamericano al hacer de nuevo la vista gorda, esta vez en un claro derribo a Gudjonhsen al borde del área.
Transcurridos quince minutos, Rijkaard decidió afinar la línea de creación de su orquesta e introdujo a Xavi por Motta. El técnico del Internacional juzgó entonces que necesitaba renovar la pólvora de sus delanteros y cambió a Alexandro "Pato" de 17 años, por otra joven promesa, Luiz Adriano, de 19. Cuando parecía que el encuentro se volcaba del lado azulgrana, el Porto Alegre, hasta entonces desaparecido, armó un contraataque que resultó letal. Corría el minuto 82, Rubens Cardoso aguantó el balón y logró superar a Puyol, el último hombre del Barcelona. A su lado vio a Adriano que entraba como un rayo y éste recogió el balón dentro del área y lo cruzó sin que Valdés nada pudiera hacer.
El centrocampista, sustituto de Fernandao, destrozó los sueños del Barcelona, en su segundo asalto al título mundial. Poco después, Ronaldinho pudo haberse erigido en salvador del Barça al ejecutar una falta pegada a la frontal del área, pero este no fue el día de la estrella brasileña, y su disparo se marchó fuera rozando el palo.
Ficha técnica del partido
Internacional de Porto Alegre, 1: Clemer; Ceara, Indio, Rubens Cardoso, Fabiano Eller; Wellington Monteiro, Alex (Vargas, m.46), Edinho; Fernandao (Adriano, m.75), Iarley y Alexandre Pato (Luiz Adriano, m.60)
FC Barcelona, 0: Valdés; Zambrotta (Belletti, m.45), Márquez, Puyol, Van Bronckhorst; Motta (Xavi, m.58), Iniesta, Deco; Giuly, Ronaldinho y Gudjohnsen (Ezquerro, m.87)
Internacional de Porto Alegre, 1: Clemer; Ceara, Indio, Rubens Cardoso, Fabiano Eller; Wellington Monteiro, Alex (Vargas, m.46), Edinho; Fernandao (Adriano, m.75), Iarley y Alexandre Pato (Luiz Adriano, m.60)
FC Barcelona, 0: Valdés; Zambrotta (Belletti, m.45), Márquez, Puyol, Van Bronckhorst; Motta (Xavi, m.58), Iniesta, Deco; Giuly, Ronaldinho y Gudjohnsen (Ezquerro, m.87)
Gol: 1-0, m.82: Adriano
Árbitro: Carlos Batres (Guatemala). Mostró tarjeta amarilla a Indio (m.45), Motta (m.55) y Adriano (m.84)
Incidencias: Final del Mundial de Clubes de la FIFA disputado en el Estadio Internacional de Yokohama ante 67.128 espectadores. El partido contó con la presencia de la princesa Takamado, en calidad también de presidenta de honor de la Federación Japonesa de Fútbol, y Joseph Blatter, presidente de la FIFA
Árbitro: Carlos Batres (Guatemala). Mostró tarjeta amarilla a Indio (m.45), Motta (m.55) y Adriano (m.84)
Incidencias: Final del Mundial de Clubes de la FIFA disputado en el Estadio Internacional de Yokohama ante 67.128 espectadores. El partido contó con la presencia de la princesa Takamado, en calidad también de presidenta de honor de la Federación Japonesa de Fútbol, y Joseph Blatter, presidente de la FIFA