Colabora

Los futbolistas pagarán los impuestos que no abonan los políticos

El PSOE usa un doble rasero en materia fiscal. Mientras sube los impuestos, los políticos mantienen hasta el 75% de sus ingresos libres de impuestos.

Una subida de impuestos nunca es bien recibida por la opinión pública, especialmente cuando se realiza tras despilfarrar recursos públicos a velocidad de vértigo. El Estado gasta más del doble de lo que ingresa y emite deuda cada semana para tapar el agujero. Por ello, defiende la mayor subida fiscal de la historia que ha realizado a través de los Presupuestos Generales del Estado para 2010.

Subida de IVA, de las rentas generadas en planes de pensiones y fondos de inversión, mas impuestos al tabaco...la lista es interminable, a la que ahora se suma una nueva iniciativa que ha pactado el PSOE con IU, ICV y BNG: elevar la tributación de los futbolistas extranjeros que juegan en la Liga Española.

El método escogido es la reforma de la "Ley Beckham", por la cual las estrellas foráneas del "deporte rey" con unos ingresos superiores a los 600.000 euros tributarán al 43%, en lugar del 24% que establece la norma. La modificación no tendría carácter retroactivo y se empezaría a cumplir en los contratos firmados a partir del 1 de enero de 2010.

El régimen que se pretende modificar fue aprobado en 2004 con la intención de atraer hacia España a científicos y directivos de multinacionales, pero los promotores de la enmienda afirman que dichas expectativas no se han cumplido y el beneficio es "utilizado ampliamente por los clubes deportivos que fichan a jugadores extranjeros con altísimas retribuciones por un plazo máximo de seis años para aprovechar la ventaja fiscal".

La enmienda propone suprimir el artículo 93 de la Ley 35/2006 de 28 de noviembre, del Impuesto sobre la renta de las Personas Físicas, ya que "no parece justo ni equitativo que las multimillonarias retribuciones de numerosos deportistas de elite o de los escasos directivos de multinacionales impatriados tributen al tipo fijo del 24%, que es el tipo mínimo marginal que se aplica a cualquier ciudadano residente en el territorio del Estado español".

La situación ha generado multitud de críticas en el seno de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), organismo que avanza la posibilidad de "parar la competición" si se aplica esta reforma, al entender que supondrá "un perjuicio irreparable para el fútbol español", ya que "la liga española perderá potencia y dejará de ser la mejor del mundo en detrimento de otras", en palabras de su presidente, José Luis Astiazarán.

Con esta medida, el PSOE vuelve a demostrar su doble rasero y parece más una medida de propaganda para ocultar el impacto de la subida fiscal a las familias y las empresas, tal como denuncia el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro. Esta diferencia de criterio queda aún más patente cuando se observan los privilegios fiscales de los que disfrutan los políticos.

Privilegios fiscales para los políticos

La razón estriba en que una parte muy considerable de sus ingresos está libre de impuestos. Y es que, entre el 40% y el 75% del sueldo real de diputados, senadores y, en general, cualquier cargo de representación pública, goza de exención fiscal. Es decir, no tributa a Hacienda.Y ello, gracias a las abultadas dietas que cobran sus señorías.

En su artículo 17.2, apartado b, de la Ley del IRPF deja exentas las cantidades que los parlamentos y otras instituciones públicas "asignen para gastos de viaje y desplazamiento" a los representantes públicos. Los expertos jurídicos señalan que este tipo de dietas incluye suculentos extras.

Un diputado podría llegar a tributar, fácilmente, al tipo máximo marginal del IRPF, establecido en el 43%. Sin embargo, la inclusión como dietas de gastos por manutención, transporte o alojamiento muy superiores a las que realmente se utilizan recortan ostensiblemente los ingresos sujetos a imposición.

Además, si el diputado o senador en cuestión ocupa un cargo como presidente o miembro de alguna comisión parlamentaria, su sueldo se dispara, pero los impuestos no. De este modo, al quedar libre de impuestos entre el 40% y el 75% de sus ingresos reales, los políticos estarían disfrutando en la práctica a un marginal de renta de entre el 10% y el 25%. Es decir, que sus señorías tributarían como un ciudadano de renta media o baja (como los mileuristas).

El PSOE sigue el camino de Reino Unido

La voracidad fiscal del Estado en el deporte no es algo exclusivo de España. Hace unas semanas Reino Unido anunció que pretende aumentar el tipo impositivo máximo al 50%, frente al 45% actual. La medida aprobada por el Gobierno laborista de Gordon Brown afectará a los sueldos que superen las 150.000 libras anuales a partir de abril de 2010.

Esta situación ha llevado a algunas estrellas de la Liga inglesa a buscar el modo de evitar un recorte en sus sueldos, según publicó The Sunday Times el pasado mayo cuando informó de que los asesores de los futbolistas ya habían empezado a exigir a los clubes que les pagaran su sueldo como préstamos sin intereses, lo que supondría que tendrían un nivel impositivo insignificante de sólo el 2,5 por ciento.

El rotativo británico citó entonces el caso del jugador ruso del Arsenal Andrei Arshavin, quien dijo haberse llevado una "desagradable sorpresa" por la alta carga impositiva para los salarios más altos en este país y recomendó a otros jugadores rusos que pretendieran mudarse a Inglaterra "tomarse las cuestiones contractuales más seriamente", informa EFE.

La situación en otros países de la UE

Por su parte, los trabajadores extranjeros residentes en Italia y Alemania tienen un régimen de tributación entre el 40% y el 45%, igual que en Francia, donde actualmente se debate sobre la exoneración de ciertas cargas fiscales a los deportistas.

Así, en Holanda, donde no hay norma específica para deportistas, los extranjeros cotizan un 42% sin tener un sueldo muy alto, aunque cuando una empresa contrata un trabajador de otro país que aporta habilidades y experiencia específicas, el 30% del sueldo está exento de gravamen.

En la actualidad los trabajadores extranjeros tributan en Italia lo mismo que los nacionales en todos los casos. En el caso de las rentas más altas para todos los ciudadanos, es decir, por encima de los 75.000 euros, la tasa fijada en 2008 es del 43%.

Los deportistas extranjeros con residencia en Alemania se rigen también por el mismo IRPF que se aplica a todos los trabajadores. Eso se traduce en un tipo impositivo del 45% para todos los profesionales que ingresen más de 250.000 euros al año.

Por su parte, Francia se encuentra actualmente sumida en un debate sobre la exoneración de ciertas cargas fiscales a los deportistas.

La semana pasada, la Asamblea Nacional votó a favor de suprimir el Derecho a la Imagen Colectiva (DIC) de los deportistas profesionales, que supone que un 30% de sus ingresos brutos quedan exentos de impuestos.

Existe división entre los propios miembros del gobierno francés sobre cuándo aplicar la supresión del DIC, con una horquilla que va desde diciembre de 2009 a 2012, año en el que estaba previsto originalmente.

El DIC, que se aplica desde 2005 con la intención de que los clubes puedan pagar mejor a sus deportistas y evitar que se marchen al extranjero, concierne a unos 1.500 atletas, la mayoría de ellos futbolistas. El texto se someterá al Senado el próximo 9 de noviembre.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario