Por su parte, Louis Van Gaal cuenta con todos sus efectivos a punto, entre los que se encuentran Robben, Ribery y Muller. La goleada ante el Hamburgo ha llegado en el momento adecuado, ya que los bávaros atravesaban por una amplia crisis, eliminados de la Copa y sin opciones en la Bundesliga, que ha desemboca en la renuncia de Van Gaal a entrenar el próximo año. A los teutones sólo les queda la baza de la Champions y, además, pueden servir en bandeja la venganza de la final de Madrid del pasado año