En el palco de honor del estadio Santiago Bernabéu, abarrotado de ex futbolistas del Real Madrid encabezados por Paco Gento, directivos como Florentino Pérez asumiendo el peso en la presentación del acto y actuales jugadores como el capitán Sergio Ramos más los argentinos Fernando Gago, Ángel Di María y Ezequiel Garay, Di Stéfano agradeció el cariño a su estilo. "Me meto en un embolado, no salgo y me meto en otro", bromeó.
Di Stéfano. Historias de una leyenda, escrito por los periodistas Enrique Ortego y Luis Miguel González, repasa la brillante etapa de uno de los jugadores considerados entre los mejores jugadores de la historia del fútbol.
"Muchas gracias por el libro. Puedo decir que todo lo que hice lo hice por el equipo porque toda la vida he jugado en un equipo de fútbol, sólo lo hice en solitario cuando era chiquito con cinco años. De grande siempre con compañeros, con la gran suerte de estar vinculados en equipos de gran magnitud como River o Real Madrid", manifestó.
"Siempre he estado con compañeros extraordinarios, casi todos internacionales y la prueba evidente es que con todos te luces. Tenía una demarcación en el medio del campo donde veía todo, lanzaba combinaciones, con una táctica con la que revolucionamos al fútbol europeo siendo cinco años seguidos campeones de Europa, cuando de verdad era difícil", agregó.
Para Di Stéfano, la Copa de Europa de su época tenía mayor dificultad "porque sólo jugaban los campeones y en cuanto perdías un partido decías adiós muy buenas, te despachaban". "Había que tener una preocupación terrible de no empatar ni perder. El equipo hizo una trayectoria buenísima, desde el año 47 que se inauguró el Bernabéu cada día mejor", explicó.
Por último, Di Stéfano destacó en su discurso el trabajo de la actual directiva blanca. "Felicito a la directiva actual comandada por Florentino Pérez porque el prestigio del club es cada vez mayor y la cantidad de aficionados crece en España y en el mundo. Arriba el Real Madrid y seguimos adelante", concluyó.