L D (EFE) El partido entre Ferrer y Beto Martín ha sido, en verdad, increíble y extraño, tanto en su discurrir como en su desenlace final. Y es que valenciano remontó al barcelonés 4 bolas de partido (tres en el novena juego del tercer set con saque del rival y una en el siguiente décimo con su servicio). Pero es que hasta ese instante, el partido había visto a ambos jugadores relevarse en rachas de ocho juegos consecutivos; es decir, tras un inicio con 2-0 a favor de Beto, Ferrer endosó ocho juegos consecutivos a su rival, lo que le dio el primer set (6-2) y le puso todo a su favor en el segundo (3-0).
El partido parecía tenerlo ganado Ferrer, no fue así. Beto Martín encadenó esta vez él ocho juegos consecutivos y se hizo con el segundo set (6-3) y se puso con 2-0 en el tercero. En medio, un periodo tanto de aciertos como de errores inexplicables y de un Ferrer que rompió una raqueta contra el suelo. Con 0-2 en contra, Ferrer reaccionó y estableció la igualada, pero cedió nuevamente su saque en el sexto juego. Beto Martín, en el noveno, con 5-3, sirvió para hacerse con el partido y contó con un favorable 40-15: la primera bola la mandó contra la red y la segunda fuera.
Pero dispuso de una tercer bola de partido, que esta vez Ferrer supo salvar con un excelente golpe para luego hacerse con el juego. Pero Beto Martín dispuso después de una cuarta bola de choque en saque del valenciano; no la aprovechó y ahí estuvo su final. Ferrer creció su juego y se anotó los siguientes juegos, cerrando el partido en su primera bola para hacerlo. Se planta en semifinales ganando un partido que parecía tener perdido.
La cara de Beto Martín, desde luego, era todo un poema ya que había dejado escapar un partido ganado. Y en gran parte por errores suyos en los momentos decisivos. "Ha sido un partido muy raro y un triunfo increíble. Con 6-2 y 3-0 a favor mía me fui del partido, él subió su nivel y golpeó muy duro pero yo me vine abajo. Era increíble como estaba tirando unos cuartos de final de un torneo del prestigio de como este", dijo Ferrer.
Para Ferrer, a veces "romper una raqueta sirve para hacerte reaccionar": "El tenis es así, hasta la última bola no se sabe nunca el vencedor. Comprendo como debe estar Beto, pues yo también estaría enfadado de haber perdido". Ferrer dijo que este año se encuentra "muy bien mentalmente": "Estoy jugando muy bien y ello me da confianza, los triunfos siempre ayudan. No me esperaba llegar a las semifinales de Roma. Ahora espero el ganador entre Rafael Nadal y Radek Stepanek".
"Rafa está jugando de forma increíble, un peldaño por encima del resto. Ante él no hay plan que valga, sólo correr y correr, y estar bien mentalmente. Desde luego, no pienso en poder ganar el torneo aunque voy a intentarlo", añadió Ferrer.
El partido parecía tenerlo ganado Ferrer, no fue así. Beto Martín encadenó esta vez él ocho juegos consecutivos y se hizo con el segundo set (6-3) y se puso con 2-0 en el tercero. En medio, un periodo tanto de aciertos como de errores inexplicables y de un Ferrer que rompió una raqueta contra el suelo. Con 0-2 en contra, Ferrer reaccionó y estableció la igualada, pero cedió nuevamente su saque en el sexto juego. Beto Martín, en el noveno, con 5-3, sirvió para hacerse con el partido y contó con un favorable 40-15: la primera bola la mandó contra la red y la segunda fuera.
Pero dispuso de una tercer bola de partido, que esta vez Ferrer supo salvar con un excelente golpe para luego hacerse con el juego. Pero Beto Martín dispuso después de una cuarta bola de choque en saque del valenciano; no la aprovechó y ahí estuvo su final. Ferrer creció su juego y se anotó los siguientes juegos, cerrando el partido en su primera bola para hacerlo. Se planta en semifinales ganando un partido que parecía tener perdido.
La cara de Beto Martín, desde luego, era todo un poema ya que había dejado escapar un partido ganado. Y en gran parte por errores suyos en los momentos decisivos. "Ha sido un partido muy raro y un triunfo increíble. Con 6-2 y 3-0 a favor mía me fui del partido, él subió su nivel y golpeó muy duro pero yo me vine abajo. Era increíble como estaba tirando unos cuartos de final de un torneo del prestigio de como este", dijo Ferrer.
Para Ferrer, a veces "romper una raqueta sirve para hacerte reaccionar": "El tenis es así, hasta la última bola no se sabe nunca el vencedor. Comprendo como debe estar Beto, pues yo también estaría enfadado de haber perdido". Ferrer dijo que este año se encuentra "muy bien mentalmente": "Estoy jugando muy bien y ello me da confianza, los triunfos siempre ayudan. No me esperaba llegar a las semifinales de Roma. Ahora espero el ganador entre Rafael Nadal y Radek Stepanek".
"Rafa está jugando de forma increíble, un peldaño por encima del resto. Ante él no hay plan que valga, sólo correr y correr, y estar bien mentalmente. Desde luego, no pienso en poder ganar el torneo aunque voy a intentarlo", añadió Ferrer.