L D (EFE) "A consecuencia de una caída, creo que la del Giro, me clavé las gafas en la nariz y, aunque no le di importancia al hematoma que se me hizo, desde entonces venía notando ciertas molestias al respirar", explica Contador.
"Tras hacerme un reconocimiento, los médicos me han detectado un desvío del tabique nasal hacia la derecha que no me deja respirar adecuadamente y por eso debo operarme. Además, llevaba ya más de un año con problemas de ronquera en la voz y de afonía. Al mirarme la garganta, me han detectado un pólipo en las cuerdas vocales que también van a extirparme", agrega.
Contador estará obligado a dejar la garganta unos días en reposo absoluto, es decir, que no podrá hablar. "Será incómodo y, además, me impedirá entrenarme normalmente en la concentración de Tenerife. El momento de volver a coger la bici dependerá de cómo evolucione, pero tengo pensado aprovechar la estancia en Tenerife para hacer un trabajo específico en el gimnasio", dijo.
Contador no cree que esto afecte demasiado a su programa: "Tal vez me retrase un par de semanas la preparación, pero no tiene mucha importancia. Durante este invierno he caminado mucho y me he dedicado a descansar para recuperarme de la temporada tan cargada que he tenido. Tengo tiempo para empezar bien en mi primera carrera, que probablemente será la Vuelta a Valencia".
El ciclista de Pinto (Madrid) logró este año convertirse en el primer español en lograr las tres pruebas grandes por equipos. Sus triunfos en el Giro de Italia y Vuelta a España se añadieron al del Tour de 2007, por lo que entró de lleno en la historia del ciclismo, en la que solo cinco ciclistas han logrado semejante hazaña, entre ellos los míticos Eddy Merckx, Bernard Hinault, Jacques Anquetil y Felice Gimondi.