L D (EFE) La etapa salió desde la Plaza Zorrilla de Valladolid, con un tiempo apacible, aunque el viento empujaba a los ciclistas del costado izquierdo, de ahí el buen ritmo con el que rodaron, ya que en la primera hora de carrera completaron 48 kilómetros. Instantes antes, en el kilómetro 22, recién comenzada la etapa y aún en la provincia de Valladolid, pasado Serrada, siete corredores iniciaron una escapada "consentida" por el pelotón.
Alan Pérez, del Euskaltel, Eloy Teruel, del Grupo Nicolás Mateo -el mejor situado en la general a 38 segundos del líder-, Juan José Abril, del Viña Magna Cropu, Juan José Oroz, del Orbea, Luis Pérez, del Andalucía Cajasur, Didac Ortega, del Benfica, y Gustavo Domínguez, del Karpin Galicia, consiguieron la mayor ventaja con el grupo perseguidor en el kilómetro 44 (6 minutos y 50 segundos). No obstante, el pelotón no se amilanó ante la fuga e imprimieron una velocidad mayor a su pedalada con el fin de darles caza antes de iniciar la ascensión al Alto de Navacerrada, un puerto de primera categoría a 1.880 metros de altitud.
En este sentido, redujeron una diferencia que, en el kilómetro 67, a la altura de la localidad segoviana de Santiuste de San Juan Bautista, bajó hasta los 5 minutos y 30 segundos, y en el kilómetro 84, era de menos de cinco minutos. El único equipo castellanoleonés, Viña Magna Cropu, demostró un día más que su intención en esta ronda es hacerse notar, puesto que volvió a colocar a uno de sus corredores dentro de la cabeza de la carrera, como ya hiciera en las dos etapas anteriores. En esta ocasión fue el vallisoletano Juan José Abril.
Mientras tanto, Caisse d Epargne, Discovery Channel y Rabobank bregaban para que el pelotón se estirase y absorbiese a los siete ciclistas escapados, cuya ventaja a falta de 25 kilómetros para la llegada era de 2 minutos y 40 segundos. Alan Pérez, uno de los escapados, atacó primero a 16 kilómetros, pero enseguida Juan José Oroz le remontó, erigiéndose en solitario en el inicio de la subida al puerto, mientras los equipos importantes del pelotón preparaban la táctica, sobre todo Caisse d’Epargne, que protegió siempre al líder de la vuelta, el ruso Vladimir Karpets, a quien vigilaba de reojo el italiano Iván Basso.
Cuando faltaban seis kilómetros para culminar la ascensión, merced al arrojo de Discovery Channel con Basso, Lepheimer y Contador, el grupo perseguidor se igualó con Juan José Oroz y Luis Pérez, los únicos corredores que seguían a la fuga. Entonces, cuando faltaban cuatro kilómetros, se soltó Juan José Cobos. de Saunier Duval, aunque al instante su intento fue contrarrestado por los perseguidores, con Contador y Koldo Gil como estiletes.
Estos dos ciclistas protagonizaron la arrancada definitiva a dos kilómetros de la meta, en la que Contador hizo valer su mayor punta de velocidad. La etapa de este viernes entre Burgo de Osma y Soria, y con dos puertos de primera categoría, dilucidará el desenlace final de esta XXII Vuelta a Castilla y León.
Alan Pérez, del Euskaltel, Eloy Teruel, del Grupo Nicolás Mateo -el mejor situado en la general a 38 segundos del líder-, Juan José Abril, del Viña Magna Cropu, Juan José Oroz, del Orbea, Luis Pérez, del Andalucía Cajasur, Didac Ortega, del Benfica, y Gustavo Domínguez, del Karpin Galicia, consiguieron la mayor ventaja con el grupo perseguidor en el kilómetro 44 (6 minutos y 50 segundos). No obstante, el pelotón no se amilanó ante la fuga e imprimieron una velocidad mayor a su pedalada con el fin de darles caza antes de iniciar la ascensión al Alto de Navacerrada, un puerto de primera categoría a 1.880 metros de altitud.
En este sentido, redujeron una diferencia que, en el kilómetro 67, a la altura de la localidad segoviana de Santiuste de San Juan Bautista, bajó hasta los 5 minutos y 30 segundos, y en el kilómetro 84, era de menos de cinco minutos. El único equipo castellanoleonés, Viña Magna Cropu, demostró un día más que su intención en esta ronda es hacerse notar, puesto que volvió a colocar a uno de sus corredores dentro de la cabeza de la carrera, como ya hiciera en las dos etapas anteriores. En esta ocasión fue el vallisoletano Juan José Abril.
Mientras tanto, Caisse d Epargne, Discovery Channel y Rabobank bregaban para que el pelotón se estirase y absorbiese a los siete ciclistas escapados, cuya ventaja a falta de 25 kilómetros para la llegada era de 2 minutos y 40 segundos. Alan Pérez, uno de los escapados, atacó primero a 16 kilómetros, pero enseguida Juan José Oroz le remontó, erigiéndose en solitario en el inicio de la subida al puerto, mientras los equipos importantes del pelotón preparaban la táctica, sobre todo Caisse d’Epargne, que protegió siempre al líder de la vuelta, el ruso Vladimir Karpets, a quien vigilaba de reojo el italiano Iván Basso.
Cuando faltaban seis kilómetros para culminar la ascensión, merced al arrojo de Discovery Channel con Basso, Lepheimer y Contador, el grupo perseguidor se igualó con Juan José Oroz y Luis Pérez, los únicos corredores que seguían a la fuga. Entonces, cuando faltaban cuatro kilómetros, se soltó Juan José Cobos. de Saunier Duval, aunque al instante su intento fue contrarrestado por los perseguidores, con Contador y Koldo Gil como estiletes.
Estos dos ciclistas protagonizaron la arrancada definitiva a dos kilómetros de la meta, en la que Contador hizo valer su mayor punta de velocidad. La etapa de este viernes entre Burgo de Osma y Soria, y con dos puertos de primera categoría, dilucidará el desenlace final de esta XXII Vuelta a Castilla y León.