L D (EFE) Con 91.000 espectadores en las gradas volcados con el espectáculo, y miles de atletas sobre el campo del Estadio Nacional (o "Nido de Pájaro"), el director de cine y coreógrafo Zhang Yimou volvió a dejar boquiabiertos a todos con una clausura llena de luz y brillo, en la que el tenor español Plácido Domingo prestó su voz.
Los fuegos artificiales abrieron la fiesta dibujando la cuenta atrás, desde el número 29 (por ser Pekín los Juegos de la vigésima novena Olimpiada) hasta el cero, y, como en la inauguración, miles de extras volvieron a tomar el estadio con vistosos trajes.
Más de mil bailarinas adornadas con campanas de plata, carros con tambores que recordaron la parafernalia del Circo del Sol, y actores saltando, corriendo y volando por los aires (en alegoría del Citius, Altius, Fortius olímpico) calentaron el ambiente para la llegada de los atletas.
Portaron las banderas de cada país deportistas que han tenido destacada actuación en Pekín, entre ellos los ciclistas Juan Llaneras (España) y Juan Esteban Curuchet (Argentina), la clavadista mexicana Tatiana Ortiz y la saltadora de longitud brasileña Maurren Higa Maggi. Papel destacado lo tuvo el pívot chino Yao Ming (todos los atletas le rodeaban para fotografiarse con él) y, sobre todo, el maratoniano keniano Samuel Kamau Wansiru, que recibió la medalla de oro por su victoria de hoy en la prueba reina del atletismo.
Más de mil bailarinas adornadas con campanas de plata, carros con tambores que recordaron la parafernalia del Circo del Sol, y actores saltando, corriendo y volando por los aires (en alegoría del Citius, Altius, Fortius olímpico) calentaron el ambiente para la llegada de los atletas.
Portaron las banderas de cada país deportistas que han tenido destacada actuación en Pekín, entre ellos los ciclistas Juan Llaneras (España) y Juan Esteban Curuchet (Argentina), la clavadista mexicana Tatiana Ortiz y la saltadora de longitud brasileña Maurren Higa Maggi. Papel destacado lo tuvo el pívot chino Yao Ming (todos los atletas le rodeaban para fotografiarse con él) y, sobre todo, el maratoniano keniano Samuel Kamau Wansiru, que recibió la medalla de oro por su victoria de hoy en la prueba reina del atletismo.
Tras la entrega de la bandera olímpica al alcalde de Londres, Boris Jonson, la llama se apagó bajo un fondo de música melancólica, para desconsuelo del público, pero una torre humana en el centro del estadio, que recreó también una llama con sus brasas y cenizas, aseguró que los Juegos de Pekín no se han ido del todo.
Con esta espectacular ceremonia de clausura, Pekín puso fin a unos vistosos Juegos en los que China se coronó por primera vez en la historia del Olimpismo como primera potencia deportiva mundial, logrando 51 oros y colocándose muy por delante de los 36 de Estados Unidos, que llevaba dominando los JJOO desde Atlanta 1996.
Con esta espectacular ceremonia de clausura, Pekín puso fin a unos vistosos Juegos en los que China se coronó por primera vez en la historia del Olimpismo como primera potencia deportiva mundial, logrando 51 oros y colocándose muy por delante de los 36 de Estados Unidos, que llevaba dominando los JJOO desde Atlanta 1996.
Jacques Rogge calificó los Juegos de Pekín como "excepcionales", en el discurso que pronunció en la ceremonia de clausura, en la que participaron artistas y personajes de China y de Gran Bretaña, entre ellos el futbolista David Beckham, y de otros países, como el tenor español Plácido Domingo. "Esta noche ponemos fin a 16 días gloriosos que recordaremos para siempre. Gracias al pueblo de China, a todos los maravillosos voluntarios y al Comité Organizador. Con estos Juegos el mundo aprendió más de China y China aprendió más del mundo", añadió.
El presidente destacó el nacimiento de nuevos talentos. "Estrellas que lo fueron en Juegos pasados han vuelto a deleitarnos. Hemos compartido su alegría y sus lágrimas y nos hemos maravillado de sus habilidades. Recordaremos durante mucho tiempo lo que hemos visto aquí".
Rogge dirigió un mensaje a los deportistas: "Sois verdaderos modelos. Nos habéis mostrado el poder unificador del deporte. El espíritu olímpico vive entre adversarios de países en conflicto. Mantened ese espíritu vivo cuando regreséis a vuestras casas".
"Han sido unos Juegos excepcionales", afirmó Rogge, "y ahora, de acuerdo con la tradición, declaro clausurados los Juegos de la XXIX Olimpiada y convoco a la juventud del mundo para que acudan a Londres de aquí en cuatro años para celebrar los Juegos de la XXX Olimpiada".
Por su parte, el presidente del Comité Organizador de los Juegos, Qi Lui, dijo que la máxima cita deportiva mundial llegaba "a una conclusión exitosa". "Deportistas de 204 países y regiones han competido en el espíritu olímpico. Han mostrado su gran perseverancia, han dado lo mejor de sí en un ambiente deportivo y han conseguido magníficos resultados batiendo 38 récord mundiales", afirmó.
El presidente destacó el nacimiento de nuevos talentos. "Estrellas que lo fueron en Juegos pasados han vuelto a deleitarnos. Hemos compartido su alegría y sus lágrimas y nos hemos maravillado de sus habilidades. Recordaremos durante mucho tiempo lo que hemos visto aquí".
Rogge dirigió un mensaje a los deportistas: "Sois verdaderos modelos. Nos habéis mostrado el poder unificador del deporte. El espíritu olímpico vive entre adversarios de países en conflicto. Mantened ese espíritu vivo cuando regreséis a vuestras casas".
"Han sido unos Juegos excepcionales", afirmó Rogge, "y ahora, de acuerdo con la tradición, declaro clausurados los Juegos de la XXIX Olimpiada y convoco a la juventud del mundo para que acudan a Londres de aquí en cuatro años para celebrar los Juegos de la XXX Olimpiada".
Por su parte, el presidente del Comité Organizador de los Juegos, Qi Lui, dijo que la máxima cita deportiva mundial llegaba "a una conclusión exitosa". "Deportistas de 204 países y regiones han competido en el espíritu olímpico. Han mostrado su gran perseverancia, han dado lo mejor de sí en un ambiente deportivo y han conseguido magníficos resultados batiendo 38 récord mundiales", afirmó.
La actuación de España
España se va de Pekín habiendo logrado 18 metales, el último hace apenas unas horas, en la emocionante final de baloncesto contra a los Estados Unidos. El medallero español no alcanza el difícil objetivo marcado de superar los trofeos de Barcelona’92. Tampoco se han superado las medallas logradas en Atenas.
Sin embargo, las medallas han sido de mayor calidad que en esa cita olímpica. En esta ocasión, se han logrado cinco medallas de oro, diez platas y tres bronces. En Atenas se consiguieron tres oros, once platas y cinco bronces mientras que en Barcelona, la mejor actuación española hasta la fecha, se obtuvieron 13 oros, siete platas y dos bronces.