El autobús del Real Madrid ha sido apedreado este miércoles a su llegada a Anfield, donde jugó el partido de vuelta de cuartos de final de la Champions contra el Liverpool (0-0), tras ser recibido en un ambiente hostil por un numeroso grupo de seguidores reds.
El conjunto blanco llegó al estadio del Liverpool una hora y media antes del encuentro y su recibimiento acabó con varias pedradas. Una de ellas impactó en uno de las ventanas laterales del vehículo, el cual tuvo que ser reparado en su llegada al recinto deportivo.
Sin heridos por el suceso, el autobús logró completar el recorrido previsto escoltado por la Policía inglesa, que abrió hueco entre los centenares de aficionados ingleses —casi todos sin mascarilla y sin guardar la distancia social— y el humo de las bengalas de color rojo.