Más problemas para el Barcelona. Tras perder por sanción a Sergio Busquets y a Arturo Vidal para el choque de vuelta de octavos de la Champions contra el Nápoles en el Camp Nou —el internacional español, que estaba apercibido, vio una cartulina amarilla, mientras que el chileno fue expulsado en la recta final por doble amonestación—, los azulgranas están pendientes ahora del estado físico de un Gerard Piqué que podría perderse el Clásico liguero contra el Real Madrid, el próximo domingo en el Santiago Bernabéu.
El central azulgrana se lastimó en el tramo final del partido de ida contra los napolitanos en San Paolo (1-1): cayó mal tras haber disputado un balón por alto con Zielinski y se acabaría torciendo el tobillo izquierdo en su caída. El técnico Quique Setién, en su debut en la Champions, sacó rápidamente a Piqué del campo para dar entrada a Clement Lenglet.
Lesión de Piqué, roja para Vidal.
— Fútbol en Movistar+ (@MovistarFutbol) February 25, 2020
Problemas para el Barcelona. #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/ysFWpt828T
En un primer momento el Barça se temió lo peor y pensó que Gerard Piqué podría sufrir una lesión grave al ver cómo cojeaba ostensiblemente en el terreno de juego. Sin embargo, ya en frío, el jugador salió caminando del estadio, sin apenas cojear, y se mostró optimista sobre su posible participación en el Clásico. Siempre, eso sí, atendiendo a las pruebas médicas a las que el futbolista será sometido en las próximas horas.
Cabe destacar que el Barça anda ahora mismo muy justo de efectivos porque a esta posible lesión de Piqué hay que añadir las bajas de Sergi Roberto y Jordi Alba, más los lesionados de larga duración Ousmane Dembélé y Luis Suárez.
Sin olvidar las ausencias por sanción de Arturo Vidal y Busquets contra el Nápoles en el Camp Nou, el miércoles 18 de marzo.