El gol de Antoine Griezmann ha servido para maquillar el flojo partido del Barcelona ante el Nápoles en San Paolo, en la ida de octavos de final de la Champions, y firmar un empate (1-1) que le permite llegar con vida al choque de vuelta, el próximo miércoles 18 de marzo en el Camp Nou. Un tanto que el francés firmaba en el único remate de los azulgranas entre los tres palos a lo largo de los 90 minutos.
Tras pagar su lenta y estéril posesión e irse al descanso con un 1-0 adverso, merced al golazo del belga Dries Mertens a la media hora, el Barça sacó petróleo de su total efectividad esta noche en la casa de Diego Armando Maradona. El resultado, con la segunda diana en la presente edición de Champions para Griezmann, fue la mejor noticia de la visita al San Paolo para un Barça que acabó con diez por la doble amonestación al chileno Arturo Vidal y que tampoco podrá contar con Busquets para la vuelta. Además, Gerard Piqué acabó siendo sustituido al final por molestias en un tobillo y, a la espera de las pruebas médicas a las que será sometido en las próximas horas, ahora mismo es seria duda para el Clásico liguero del próximo domingo contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu.
Samuel Umtiti e Ivan Rakitic fueron las grandes novedades en el once azulgrana, en el estreno de Quique Setién en la Champions. De inicio, el Barça controló el balón, pero le costó jugar en vertical ante un Nápoles extremadamente compacto, que se encerraba con las tres líneas en pocos metros y que buscaba sorprender al contragolpe. Mertens, en presión constante sobre Segio Busquets, dificultó el trabajo de un Barcelona que en la primera mitad solo chutó una vez a puerta con Messi (m.8), en su estreno en San Paolo, y que pagó una indecisión defensiva de Junior Firpo con el gol napolitano.
A la media hora de juego, el polaco Zielinski superó al lateral izquierdo barcelonista y ofreció el balón a Mertens, que fulminó al meta alemán Ter Stegen con un derechazo a la escuadra. Un gol histórico para el delantero belga, que alcanza al eslovaco Marek Hamsik como máximo goleador del Nápoles (121 goles). Necesitaba nuevas soluciones el Barcelona, en un San Paolo que rugía y que estuvo a punto de celebrar el segundo gol antes del descanso, cuando el griego Kostas Manolas, viejo conocido del conjunto barcelonista por haberle eliminado de la Champions con la Roma en 2018, remató fuera una asistencia del español José Callejón.
No empezó de forma mejor la segunda mitad, con Busquets viendo una amarilla por frustración y que se perderá la vuelta por acumulación de tarjetas. Su falta provocó la lesión de Mertens, que fue obligado a pedir el cambio. Fue precisamente tras la salida del delantero belga cuando llegó el 1-1. Busquets contó con más espacio y, con un magistral pase vertical, encontró al portugués Nelson Semedo, que centró de primeras para que Griezmann fusilara a Ospina a placer (m.57).
El partido, hasta ese momento muy bloqueado tácticamente, se volvió más imprevisible, con Insigne y Callejón perdonando el segundo gol napolitano y Messi no pudiendo rematar por pocos centímetros un pase de Arturo Vidal. Los entrenadores, que intercambiaron sentidos elogios en la víspera, decidieron jugar nuevas cartas para aprovechar el momento. Setién, que no tenía a grandes alternativas a disposición a causa de las bajas de Luis Suárez, Dembelé, Jordi Alba y Sergi Roberto, buscó más ritmo con la entrada del brasileño Arthur por Rakitic, mientras que Gattuso agregó chispa ofensiva con Matteo Politano por Callejón.
Intercambiaron avisos los dos equipos, pero con poca pegada. Insigne, en el Nápoles, y Arthur, en el Barcelona, lo intentaron con dos disparos desviados. Fueron las últimas jugadas técnicas en un partido que acabó con nerviosismo y malas noticias para el cuadro catalán. Vidal acabó expulsado por ver dos amarillas en apenas dos minutos, por falta y encararse posteriormente con el portugués Mario Rui, mientras que Piqué tuvo que retirarse por molestias en un tobillo.
Ficha técnica
SSC Nápoles, 1: Ospina; Di Lorenzo, Maksimovic, Manolas, Mario Rui; Fabián, Demme (Allan, m.80), Zielinski; Callejón (Politano, m.74), Mertens (Milik, m.55) y Insigne
FC Barcelona, 1: Ter Stegen; Semedo, Piqué (Lenglet, m.93), Umtiti, Junior; Sergio Busquets, Rakitic (Arthur, m.56), De Jong, Vidal; Messi y Griezmann (Ansu Fati, m.87)
Goles: 1-0, m.30: Mertens; 1-1, m.56: Griezmann
Árbitro: Felix Brych (Alemania). Mostró tarjeta amarilla a Insigne (m.61) y Mario Rui (m.89), del Nápoles; y a Busquets (m.50), Messi (m.66) y Griezmann (m.83), del Barcelona. Expulsó por doble amonestación a Arturo Vidal (ms.87 y 89)
Incidencias: Partido de ida de octavos de final de la Liga de Campeones disputado en el estadio San Paolo de Nápoles ante cerca de 60.000 espectadores