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Champions League

Los principales señalados tras la debacle del Barcelona en Anfield

El Barcelona colapsó colectivamente en Anfield pero hubo nombres propios que quedaron retratados.

El Barcelona colapsó colectivamente en Anfield pero hubo nombres propios que quedaron retratados.
El Barcelona colapsó en Anfield | EFE

El F.C. Barcelona protagonizó este martes uno de los mayores ridículos de su historia. Tras la debacle de Roma es inadmisible que le haya vuelto a ocurrir lo mismo en Liverpool. Los reds superaron a los azulgranas en todos los aspectos del juego. La segunda parte, en la que el Barça bajó los brazos, no tiene justificación. Los de Klopp ganaron por fútbol, pero sobre todo por alma, corazón, testiculina y carácter.

El cuarto gol, uno de los más vergonzosos de la historia del fútbol, retrata a un equipo que en la segunda parte parecía lleno de zombis. El F.C. Barcelona se transformó en el Walking Dead F.C. Desconcentrados, a los culés les temblaron las piernas en Anfield. Colectivamente, el Barça colapsó. Si bien es cierto que todo el equipo, quitando al chileno Vidal, fue incapaz de dar la talla, el batacazo de Liverpool deja retratados a muchos.

Ernesto Valverde

Una año más, su equipo sufrió una desconexión tremenda en la Champions tras sacar una jugosísima ventaja en el partido de ida. Ocurrió en Roma y, este martes, la historia se repitió en Liverpool. Verle en la banda con las manos en los bolsillos cuando a su equipo le pasaban por encima en la segunda parte es una imagen que resume lo que muchos culés sienten: impotencia. Ernesto arbusto Valverde se equivocó gravemente en el aspecto táctico al repetir once en Anfield, más aún al no ser capaz de rectificar y tapar la sangría que tenía el Barça en la banda izquierda –a Jordi Alba lo violaron deportivamente hablando– y su inmovilismo en la segunda parte terminó de enterrar a su equipo. El técnico vasco parece tener las horas contadas en Can Barça.

Lionel Messi

El capitán culé volvió a demostrar que no tiene carácter de estrella. Cuando vienen mal dadas, Messi desaparece. Es cierto que lo único que hizo el Barça en ataque partió de sus botas, pero en la segunda parte, con el 2-0, Messi se paseó por el campo. Andando y con la cabeza agachada, su imagen dista mucho de ser la de un verdadero líder. Su actitud cuando más lo necesitaba su equipo dejó mucho que desear.

Gerard Piqué

El central, santo y seña del F.C. Barcelona, no fue capaz de imprimir carácter a sus compañeros. Es inadmisible que a un equipo de la categoría del Barcelona le claven dos goles en dos minutos al inicio de la segunda parte. La falta de oficio para parar el partido, para hacer una falta y tomar oxígeno, para saber sufrir cuando te están acorralando, sentenció a un equipo al que le temblaron las piernas y que tenía la cabeza en Roma. A Piqué, el verdadero líder de este equipo, se le echó mucho en falta ayer en Anfield.

Sergio Busquets

Superado, no fue capaz de dar equilibrio a su equipo. Físicamente sufre horrores y cada vez se le notan más las carencias en ese aspecto. Su temporada es un serio aviso a navegantes: necesita un recambio de garantías que, hoy por hoy, no tiene el F.C. Barcelona. Veremos si Frenkie de Jong puede hacer ese papel.

Luis Suárez

Al uruguayo, uno de los mejores delanteros del mundo, comienza a pesarle la edad. Por su constitución física los años se le notan más. Otra pieza clave culé que no tiene sustituto. Además, sus números en Champions dañan a la vista. Es muy difícil –por el momento, imposible– ganar la Orejona si tu delantero centro lleva 1.330 días sin acertar con la portería rival en los partidos europeos. Luis Suárez marcó el 1-1 del Roma-Barça disputado el 16 de septiembre de 2015. Tres años y medio sin marcar en Champions son demasiados.

En Anfield se peleó como siempre con los defensas rivales, pero no tuvo presencia en el área y apenas disparó en una ocasión. Los problemas en la rodilla han condicionado su temporada y le impiden ayudar en la presión alta todo lo que necesitaría el equipo.

Philippe Coutinho

La temporada del brasileño, que costó 160 millones de euros, es lamentable. Llegó como pieza fundamental a la hora de desequilibrar y aportar calidad en tres cuartos y su rendimiento no es propio de una supuesta estrella. Su intrascendencia es la nota predominante en los partidos. En Anfield pasó, una vez más, desapercibido. La afición del Barça no aguanta más y para muchos está sentenciado. Veremos por cuanto lo puede colocar la directiva culé.

Jordi Alba

Tras firmar la mejor temporada de su carrera, dio el petardazo en el día clave. Dos fallos clamorosos en los dos primeros goles hundieron a su equipo. Jordi tampoco pudo ser el carrilero desequilibrante que complementa a la perfección los movimientos en diagonal de Leo Messi. El balance negativo de Alba en defensa y en ataque privó a Valverde de uno de sus grandes argumentos futbolísticos para replicar los ataques en tromba planteados por Jürguen Klopp.

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