Faltaba una hora para comenzar el encuentro cuando la UEFA hacía oficial la no convocatoria de Cristiano Ronaldo. Cualquier equipo, incluso el Real Madrid, nota la ausencia del máximo goleador en la Champions. Los blancos partían sin su mejor jugador y no pudieron jugar con once futbolistas en plenas condiciones hasta la segunda parte, cuando Zidane dio entrada a Jesé por un Karim Benzema que se arrastró por el campo el tiempo que estuvo. "Están al 100%", dijo el técnico francés en la previa en referencia a Ronaldo y Benzema.
El mal estado de forma del jugador galo puede justificar de alguna forma el mal juego del Real Madrid en la primera parte. Para ser justos, el pésimo partido que ofrecieron los dos equipos. Cabía esperar algo más de fútbol de un partido entre los dos equipos más caros del mundo cabía esperar algo más de fútbol. Tuvimos que esperar hasta mediada la segunda parte para ver velocidad, regates y las primeras ocasiones. Ahí sí que fue superior el Real Madrid, dando la impresión de estar más entero físicamente que los citizens.
Benzema se arrastró por el campo
Una última media hora trepidante evitó que se hable de unos de los peores partidos de semifinales de la historia de la Champions. Al descanso, cero disparos entre dos equipos sumamente conservadores. El Madrid, condicionado por la escasa velocidad de Benzema, tuvo que echarse atrás y nunca comenzó su presión en campo contrario. El Manchester City trataba de combinar, algo que quizá no esperaban, mientras que el Madrid esperaba un contrataque que nunca llegaría.
El Madrid adolecía en la salida. El mismo problema que arrastra desde hace tiempo. Casemiro, Kroos y Modric, que apenas participaba, no encontraban lineas de pases en vertical. Demasiados pases sencillos. Un juego arrastrado por la nula movilidad de Benzema, acostumbrado a oxigenar al equipo y facilitar una transición ofensiva más sencilla. Esto provocó, entre otras cosas, que Pepe y Sergio Ramos perdieran una infinidad de balones con el pase directo en largo. Querían salir jugando pero no sabían cómo. Así sufría el Madrid.
Un sufrimiento relativo porque no había ocasiones aunque no tenían la pelota. Por eso Pepe tenía amarilla y Ramos se la merecía antes de la media hora. Silva se lesionó en el minuto 39, compensando algo la lesión de Ronaldo. Entró Ilheanacho y terminó la primera parte sin que pasara absolutamente nada. El Madrid había aguantado muy bien, juntándose en defensa, con Lucas Vázquez, el sustituto de CR7 en el once, aportando más atrás que adelante. Faltaba dar un paso hacia el gol. Algo que los madridistas sí harían en la segunda parte.
La salida de Benzema iba a beneficiar al Real Madrid sí o sí. El elegido fue Jesé. Y es que, como ya pasara la temporada pasada y llegado el tramo final del curso, se ha retratado la dirección deportiva del club. Sin Benzema y sin Ronaldo, Zidane no tenía delantero centro. Poco a poco y con el paso de los minutos, el Real Madrid fue estirándose. Pudo adelantar líneas y ahí crecieron todos porque, con la pelota, todos los jugadores del Madrid se sienten más cómodos. Son más felices.
Gran segunda parte de Pepe
Destacar especialmente a Pepe, que realizó una segunda parte formidable. Las mejores ocasiones, y casi las únicas, fueron en la portería de un soberbio Joe Hart que salvó el multimillonario proyecto del City con varias paradas de mérito. De menos a más dificultad y casi todas llegaban a balón parado. Fue a partir del minuto 65 cuando el Madrid empezó a desmelenarse y empezaron a pasar cosas. Daba la sensación de que el Real Madrid estaba mucho más fresco en el tramo final.Cabezazo de Ramos a las manos de Hart, disparo de Bale que se marcha por poco, posible penalti sobre Lucas Vázquez, Hart salvando con los pies un remate de Casemiro en otro córner... El Madrid fue un vendaval durante media hora. Merecían más, y eso que faltaba la mejor ocasión. Un remate de Pepe a medio metro de la línea de gol. Toda la portería para él, a excepción del espacio donde disparó, al cuerpo de Hart. La suerte y la puntería también juegan, y más cuando las eliminatorias son tan igualadas.
El Madrid supo sufrir cuando jugó con diez para, poco a poco, madurar el partido y terminar mereciendo ganar. Sabor amargo. Es una lástima que se vuelvan a España con un empate a cero que sabe a poco, pero da la impresión de que en la vuelta, con Ronaldo y Benzema en mejores condiciones, el Madrid podrá trasladar su superioridad al marcador y lograr un triunfo que le devuelva a la final contra el Atlético de Madrid o el Bayern de Múnich,
Ficha técnica
Manchester City, 0: Hart; Sagna, Kompany, Otamendi, Clichy; Fernando, Fernandinho; Jesús Navas (Sterling, m.76), De Bruyne, Silva (Iheanacho, m.40); y Agüero
Real Madrid, 0: Keylor Navas; Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo; Casemiro, Kroos (Isco, m.88), Modric; Lucas Vázquez, Bale y Benzema (Jesé, m.46)
Árbitro: Cüneyt Çakir (Turquía). Mostró tarjeta amarilla a Pepe (m.23) y Carvajal (m.92), del Real Madrid; y a David Silva (m.37), del Manchester City
Incidencias: Partido de ida de semifinales de la Liga de Campeones disputado en el Etihad Stadium de Manchester (Inglaterra) ante unos 55.000 espectadores, entre ellos más de 2.500 seguidores del Real Madrid