Ya lo avisó Mourinho hace 6 días antes de jugar ante el Celta de Vigo: "No sería para mí una gran sorpresa perder algún jugador más en los próximos días". Se mordía la lengua el técnico portugués ante las numerosas bajas por el virus FIFA y ayer en la sala de prensa tras perder ante el Borussia de Dortmund hizo lo mismo tras lesionarse Shami Khedira. No quiso valorar si era culpa del propio jugador, de los clubes o de las selecciones pero la realidad es que pierde a su cuarto jugador por culpa de los partidos de selecciones.
El centrocampista estará de baja mínimo dos semanas. A pesar de que no se marchó cojeando del estadio, hay preocupación en el equipo porque la lesión podría ser aun más grave ante la recaída. Khedira no jugó con Alemania y con el Real Madrid ante el Celta para evitar precisamente lo que sucedió ayer.
Mañana pasará reconocimiento médico en Madrid y será cuando los servicios médicos sepan definitivamente si hay rotura en su muslo izquierdo. Pero con lo que cuenta Mourinho es que no podrá tener disponible a Khedira en las citas ligueras ante Mallorca, Zaragoza y Levante y lo que es peor, la cuarta jornada de Liga de Campeones ante el Borussia Dortmund. La primera reacción del entrenador ayer fue poner a Luka Modric junto a Xabi Alonso.