L D (EFE) El Mundial 2004 llega a Suecia por segundo año consecutivo con el francés Sebastien Loeb, compañero de equipo de Sainz, en el primer puesto del Mundial de pilotos tras su victoria sobre el asfalto invernal del Rally de Montecarlo, la carrera que tradicionalmente inaugura el certamen.
Tras él están los dos pilotos de Ford, el estonio Markko Martin y el belga Francois Duval; los dos de Peugeot, el finlandés Marcus Gronholm -ganador de las dos últimas ediciones de la carrera sueca- y el belga Freddy Loix, el francés de Mitsubishi, Gilles Panizzi, y, por fin, el actual campeón del mundo, el noruego Petter Solberg (Subaru).
El Rally de Suecia, que este año cumple su 53 edición, es una de las carreras más rápidas y espectaculares de cuantas se disputan en el Mundial. En la nieve y el hielo de Suecia de alcanzan habitualmente velocidades medias superiores a los 110 kilómetros por hora -el año pasado el ganador llegó a los 118 de promedio-, con temperaturas que pueden alcanzar los treinta grados bajo cero. Las características específicas de esta carrera hacen especialmente delicada la elección de los neumáticos y del tipo de clavos que debe incluir en la banda de rodadura.
Otro de los rasgos de esta prueba es que en su medio siglo de existencia jamás ha ganado un piloto que no sea sueco o finlandés. Romper esta larga tradición en uno de los objetivos que sigue teniendo Carlos Sainz, cuatro veces segundo (1996, 1997, 1998 y 1999) y en dos ocasiones tercero (2001 y 2002) en esta carrera y que ya acabó con la leyenda del Rally de Finlandia al convertirse en el primer piloto no escandinavo que lo agregó a su palmarés. Fue en 1990, entonces con un Toyota. "Este es uno de mis rallys favoritos, pero aún no he conseguido ganarlo. Si lo logro sería algo histórico. Nadie que no sea sueco y finlandés ha logrado ganar aquí. Yo me preparo a conciencia cada año para esta carrera y espero que este año pueda conseguirlo", ha señalado Carlos Sainz, que el año pasado fue noveno.
El recorrido total del rally será de 1.981,68 kilómetros, 394,80 de ellos correspondientes a 19 tramos cronometrados. Los organizadores han trazado el recorrido aun más al norte para que la presencia de la nieve esté garantizada. En 1990 la carrera llegó a suspenderse por falta de nieve.